Los talibán advirtieron ayer de que las vidas de los 21 surcoreanos capturados hace más de dos semanas en Afganistán están en manos de los presidentes estadounidense y afgano, George W. Bush y Hamid Karzai, respectivamente.

Qari Yousef Ahmadi, que ejerce de portavoz del grupo que secuestró a los surcoreanos, manifestó que «Karzai y Bush -que se encontraban reunidos en Camp David- tendrán la responsabilidad de lo que sea que les ocurra a los rehenes».

Además, afirmó que los secuestros continuarán en Afganistán, sea lo que sea lo que decida el Gobierno de Kabul sobre las peticiones de los talibán para liberar a los cooperantes secuestrados.

Ahmadi explicó que los milicianos y diplomáticos surcoreanos que se han desplazado a Afganistán para tratar de liberar a lo rehenes están permanentemente en contacto telefónico, pero que todavía no han acordado un lugar exacto para llevar a cabo las negociaciones sobre el destino de los cooperantes.

En este sentido, manifestó que si no alcanzan un acuerdo en una negociación en persona, el grupo insurgente no se hará responsable de «cualquier cosa» que les pueda ocurrir a los surcoreanos.

Medicinas

Por otro lado, Mohammad Hashim Wahwaj, un médico afgano que posee una clínica privada, indicó ayer que ha entregado antibióticos, vitaminas y kits de primeros auxilios en la provincia de Ghazni para que los talibán se los entreguen a los misioneros surcoreanos, algunos de los cuales están muy enfermos.