El pasado lunes, 6 de agosto, fue retirada de la fachada del Ayuntamiento de Trebiñu una pancarta que durante varios años ha exteriorizado la voluntad mayoritaria de la población trebiñesa de pertenecer a la Administración de su marco territorial natural, que es Araba.

A esta actuación de la alcaldesa del PP, que es calificada por los defensores en la integración administrativa en Araba de «medida represiva contra la libertad de expresión», hay que añadir la decisión de la primera regidora de suprimir el euskara de los membretes en cartas o sellos del Consistorio trebiñes.

Desde la iniciativa ciudadana Trebiñu Batu, Javier Ruiz denunció que el gobierno «minoritario» del PP se valió del único voto del corporativo del PSOE para tomar esta decisión en un pleno extraordinario que se celebró el pasado 20 de julio. Ruiz afirmó que «el concejal del PSOE se ha declarado partidario de la integración administraiva en Araba. La mayoría de quienes votaron a esa formación en las pasadas elecciones locales lo hicieron -subraya- pensando que lo hacían al PSOE de Araba», no al de Burgos.

Javier Ruiz señaló que con la decisión de retirar la pancarta de la fachada de la casa consistorial, que ha permanecido varios años en el lugar sin que se hayan producido problemas en la localidad, «comienza la represión por el partido minoritario -en referencia al PP- con el respaldo de quienes usan los votos a su conveniencia y antojo, como estamos viendo en Nafarroa», dirigiendo su mirada a las filas del PSOE, que apoyó al grupo municipal del PP, partidario de mantener su vinculo con Castilla.

Los defensores de la integración en Araba aseguran que la desaparición de la pancarta «expresa fielmente el desembarco de los franquistas» en Trebiñu.