La seguridad se ha convertido en un valor absoluto en el discurso político. Desde los atentados del 11-S, la vieja aspiración de recortar las libertades civiles se ha ido abriendo paso mediante legislaciones especiales y muchas, muchas falacias estadísticas. Mientras las cámaras espiaban el recinto festivo de Baiona, la ministra Alliot-Marie anunciaba su intención de triplicar las cámaras en red en el Estado francés. El proyecto se debatirá a la vuelta de vacaciones.

Los emplazamientos al PSN fueron la novedad del cuarto discurso de investidura de Miguel Sanz. Pero éste no parece dudar de que tras darle el cargo este partido le facilitará además la gestión de la legislatura. Comenzó recordándole que UPN apoyó un gobierno del PSN en que Gabriel Urralburu sólo tenía «catorce parlamentarios» (UPN suma ahora 22). Y lo terminó asegurando que UPN, CDN y PSN «hemos acordado garantizar la gobernabilidad». El PSN lo niega.

Miguel Sanz Sesma va a volver a ser presidente y debería ser protagonista, pero los periodistas que provocan un llenazo histórico en el Parlamento navarro sólo tienen ojos para otras doce personas. O más bien doce más uno. Ese uno es el secretario general del PSN.

Jean Jacques Caron Baionako suprefeta eta Patrice Michel Baionako auzitegiko prokuradorea pozik agertu ziren atzo Baionako segurtasun bilanarekin. Horien hitzetan, delinkuentzia orokorra %48 murriztu da; arlo guztietan, gainera. Emaitza aurtengo segurtasun neurriei esker lortu dela nabarmendu zuten. Bi bortxaketa salatu dituztela argitu zuen Michelek, eta kasu baten inguruan zalantzak dituela adierazi zuen.