La Unión de Agricultores y Ganaderos de Alava (UAGA) calificó ayer de «insostenible» el actual modelo territorial de Araba y denunció que la reciente revisión de las normas subsidiarias en Dulantzi, que permitirá duplicar el parque de viviendas del citado municipio, que puede pasar de 900 a 2.000, conllevará un «despilfarro de recursos naturales, despreciando absolutamente la tierra fértil».

Mediante un comunicado, el sindicato agrario subrayó que, según datos aportados por el instituto de estadística dependiente del Gobierno de Lakua, Eustat, este municipio disponía en el año 1998 de un parque de 450 viviendas, que crecieron hasta alcanzar las 658 en el año 2001.

El aumento de nuevas construcciones ha continuado desde entonces hasta alcanzar la cifra de 900 a finales del año pasado.

UAGA criticó que la nueva revisión de la normativa municipal de la citada localidad alavesa «confirma» este ritmo de crecimiento y permite construir 1.100 nuevas viviendas, lo que implica «duplicar» su población «cada ocho años».

Para el sindicato agrario alavés, estos niveles de crecimiento «se justifican agotando, en apenas diez años, las posibilidades edificatorias que otorgaba el Plan Territorial de Alava Central, una herramienta de ordenación territorial aprobada en 2004 y para la que, en un primer momento, se contemplaba un horizonte de entre 20 y 50 años».

Cabe recordar que el sindicato UAGA ya criticó en su día la aprobación del Plan Territorial de Alava Central porque consideraban que basaba exclusivamente el desarrollo del territorio en el «despilfarro de recursos naturales, despreciando absolutamente la tierra fértil y sin afrontar el problema del agua».

Falta de agua

Sobre la escasez de este recurso, el sindicato consideró «desesperanzador» que una localidad que durante los últimos años ha mantenido sistemáticamente restricciones de agua durante el período de verano, «se plantee volver a duplicar su población».

Para el sindicato, además de los impactos sobre el territorio y los recursos naturales, este tipo de crecimientos «plantea graves problemas sociales que están acabando por desnaturalizar la vida de un importante número de pueblos» del territorio alavés.