La Policía china está buscando ocho kilos de uranio, elemento radiactivo que se puede usar para fabricar bombas atómicas, que una banda de criminales intentó vender en el mercado negro, publica ayer el diario «China Daily».

Los cuatro integrantes de la banda fueron arrestados en enero, después de que un potencial comprador de Hong Kong los denunciase a las autoridades.

Sin embargo, el proceso judicial, en una corte de la provincia sureña de Cantón, está detenido hasta que aparezca el uranio perdido debido, según los acusados, a que «se estuvo moviendo entre muchos compradores potenciales».

Los hechos tuvieron lugar entre abril de 2005 y enero de este año cuando los cuatro detenidos, procedentes de la provincia sureña de Hunan, trataron de vender el material por un mínimo de 26.000 dólares el kilo, de acuerdo con la investigación.