Familiaren y amigos recuerdan a la joven Laura Orue
GARA |
Un centenar de personas recordaron ayer en Ugao, con una misa y una ofrenda floral, a la joven Laura Orue, que desapareció tras finalizar su jornada de trabajo en Zeberio hace ocho años y cuyo cadáver fue hallado, semienterrado, una semana más tarde, sin que aún hayan sido identificados los autores de su muerte.
Tras un acto litúrgico en su memoria que fue oficiado en la Iglesia de Ugao, amigos y familiares de la joven se dirigieron a pie hasta el monolito instalado junto al pinar donde fue encontrado su cuerpo sin vida, donde desplegaron una pancarta con la leyenda en euskara «Laura Orue Justicia», y la fotografía con el rostro sonriente de esta estudiante, que tenía 21 años cuando murió.
En un homenaje que se desarrolló en silencio, primos, sobrinos, amigos y otros allegados a la joven fueron depositando rosas junto a la piedra que recuerda a Laura.
De camino al monolito, los asistentes permanecieron detenidos un minuto frente al cementerio donde descansan los restos mortales de la joven.
Los padres de Laura, que estuvieron presentes en la misa, no siguieron a la comitiva hasta el pinar donde apareció muerta su hija y, en su lugar, asistieron a otra misa que en memoria de la joven fue oficiada en Zeberio.
Al término del acto, Susana Azkueta, amiga de Laura, lamentó entre lágrimas que, «por desgracia, no se sabe nada» de las circunstancias en las que se produjo este crimen. «A ver si encuentran al asesino y descansaremos todos», expresó, en declaraciones a los periodistas, después de manifestar que las personas más próximas a Laura recuerdan «cada día» a esta vizcaina.