El Aahrus Museum de Dinamarca es una instalación dedicada al arte moderno que se ha convertido en un auténtico icono de la ciudad tan sólo tres años después de su construcción. Allí se desarrolla el certamen «Taste The Art», una cita del arte y la gastronomía que congregará dentro de unos días a los mejores cocineros europeos.

El hondarribitarra Bixente Muñoz ha sido seleccionado para participar en esta prueba, que él siente como un reto «más que profesional, personal y humano. En muchas ocasiones he defendido la cocina desde el punto de vista de las emociones y ahora se plantea una cita en la que debo interpretar el arte y llevarlo a mi terreno, al de la cocina. Será complicado, pero se trata de una propuesta fascinante. De las que no pueden rechazarse».

Además de interpretar el domingo dos obras de arte que le mostrarán la víspera en la visita al Aahrus Museum, el cocinero de Hondarribia, que es el único representante del Estado español en el evento, ofrecerá una conferencia ante jóvenes cocineros nórdicos, a los que tratará de transmitir su forma de entender la cocina, basada en la importancia de «alcanzar una filosofía de trabajo en la que creer». Así, les hablará de «lo esencial del producto, sobre todo del producto local», de «la confianza que hay que depositar en uno mismo» y de que la cocina es «algo más que ofrecer comida, algo más que técnica». «La cocina en la que creo, y eso quiero transmitirles, es la que ofrece sensaciones y una vivencia única», afirma.

Bixente Muñoz deberá ofrecer cinco lunchs en la ciudad danesa, uno cada día del evento, para trescientas personas. «Hemos trabajado duro para establecer la esencia de lo que hacemos aquí y trasladarlo allí. Vamos a ofrecer una variada representación de lo que somos basándonos tanto en productos nuestros como en otros que allí son fantásticos por su calidad».

Una de esas jornadas la dedicará en exclusiva al pincho con el que resultó vencedor en el Campeonato de España celebrado en 2006 en Valladolid: la tosta de bacalao ahumado con foie y pimiento del piquillo. «Creo que es uno de los mejores pinchos que he hecho por muchos motivos: por la importancia de los sabores, por cómo se complementan sus ingredientes, por los matices... son muchas cosas que terminan configurando un bocado que sabe a gloria». El joven cocinero guipuzcoano cerrará su comparecencia en Dinamarca con una cena para personalidades VIP, que será presidida por el Ministro de Alimentación, Agricultura y Pesca de Dinamarca, Hans Christian Schmidt, y a la que acudirán destacadas autoridades, además del considerado mejor cocinero nórdico, Harald Osa. «Será una gran responsabilidad. Soy consciente de que tras de mí estará el nombre de Hondarribia y la imagen de los pinchos vascos. Creo que todos mirarán con esa visión nuestro trabajo. Y vamos a estar a la altura con un trabajo muy elaborado y pensado», dijo.

Para Muñoz, cocinero dinámico e imaginativo, ésta es su primera salida internacional. «Acudo a mostrarme tal y como soy: un cocinero que cree en lo que hace, que, cuanto más satisfacciones es capaz de dar, más ama esta profesión. Llegar a este convencimiento me ha costado algún tiempo, pero ahora afronto cada compromiso como si fuera el más importante. Me dejo la piel en ello, porque sé que si se reconoce mi cocina es porque he logrado hacerla de corazón».