Bruselas abre un debate «ambicioso y sin tabúes» sobre el presupuesto
La Comisión Europea ha abierto el debate sobre la política presupuestaria, en el que quiere revisar en profundidad las prioridades del gasto. Bruselas afirmó que busca un debate «ambicioso y sin tabúes». La reforma de la política agraria y el «cheque británico» volverán a ser los temas más conflictivos en una negociación que la Comisión vincula a la reforma institucional de la UE. De momento, la Comisión no ha planteado propuestas concretas.
GARA |
La Comisión Europea (CE) dio ayer el pistoletazo de salida a la revisión de la política presupuestaria de la UE y propuso como primer paso calcular el «valor añadido» de las diferentes partidas de gasto y una nueva definición de las prioridades.
El presidente del Ejecutivo de la UE, José Manuel Durao Barroso, recordó que, tal y como acordaron los gobiernos en 2005, la estructura del presupuesto comunitario debe reformarse para las próximas perspectivas financieras (2014-2021) y Bruselas tendrá que presentar una propuesta con ese objetivo entre 2008 y 2009.
La promesa de una revisión en profundidad del sistema de ingresos y gastos -incluido el llamado «cheque británico» y la política agrícola- fue lo que permitió hace dos años aprobar el marco presupuestario actual 2007-2013, tras meses de discrepancias entre los estados.
La reforma del presupuesto, subrayó Durao Barroso, «no tiene que ver sólo con el dinero, sino que debe reflejar nuestra visión de Europa» y, para ello, primero «tenemos que decidir qué resultados queremos de la política de la UE».
Cambios rápidos
Tanto Durao Barroso como la responsable europea de Presupuesto, Dalia Grybauskaite, señalaron que la Comisión sólo pretende abrir un amplio debate sobre la calidad del gasto comunitario y recalcaron que la iniciativa sobre las perspectivas financieras de 2014-2021 corresponde al próximo colegio de comisarios que debería relevar al actual en 2009.
Durao Barroso hizo hincapié en que la estructura del presupuesto de la UE ha cambiado mucho en los últimos años y, así, la Política Agrícola Común (PAC) ha pasado de representar el 61% del gasto a cerca del 32%, mientras que los fondos para competitividad, acción exterior y desarrollo rural han aumentado del 7% al 26%. «Pero el mundo cambia todavía más deprisa», destacó Durao Barroso, y por eso es necesario reevaluar las prioridades de gasto. Grybauskaite indicó, por su parte, que Bruselas quiere un debate presupuestario «sin tabúes ni provocaciones y ambicioso».
La comisaria vinculó este análisis sobre la estructura del presupuesto al proceso en marcha de reforma institucional y confió en que el acuerdo sobre el tratado de la UE que los 27 esperan concluir este otoño sirva de base para la redefinición de las prioridades presupuestarias.
Grybauskaite explicó que éste es un «ejercicio político» y por eso la Comisión ha preferido no hacer propuestas concretas sobre política de gasto, pues quiere primero conocer la opinión de los estados miembros y de los ciudadanos, sobre la calidad del gasto comunitario.
Para ello, ha habilitado una dirección de correo electrónico (budget-review@ec.europe.eu) a la que cualquier ciudadano de la UE podrá enviar hasta el 15 de abril de 2008 sus opiniones sobre el presupuesto y su futura reforma, comentarios que la Comisión «tendrá en cuenta» en la propuesta que presentará no más tarde de 2009.
La revisión del marco presupuestario de la UE debe incluir la PAC y el denominado «cheque británico» -por el que Gran Bretaña recupera parte de su aportación a las arcas comunitarias-, las dos cuestiones más espinosas de la negociación. La Comisión quiere también determinar qué políticas de gasto es «conveniente» que sigan recayendo en Bruselas y cuáles cede a la gestión de los estados.
Bruselas señaló como retos de la UE la globalización, el desarrollo tecnológico y científico, el cambio demográfico, la ampliación de la UE, el cambio climático, la escasez de las materias primas, las migraciones y el «terrorismo».
La Comisaria de Agricultura, Mariann Fischer-Boel, está preparando una evaluación sobre los resultados de la PAC y la reforma de 2003, que deberá presentar en noviembre próximo y que servirá de base para la discusión global.
José Manuel Durao Barroso saludó ayer lo que llamó «el compromiso» del presidente francés, Nicolás Sarkozy, con una reforma de la Política Agrícola Común de la UE (PAC). Sarkozy afirmó el martes que «la PAC, tal y como existe hoy, no puede responder a los desafíos de después de 2013». «Me felicito», dijo Barroso, «de que el presidente en persona haya tomado la iniciativa de lanzar el debate en Francia, y de no permanecer en una posición inmovilista». El presidente de la CE aseguró que el movimiento francés no le había sorprendido e informó de que el 31 de agosto mantuvo una entrevista en París con Sarkozy en la que ya abordaron el asunto. No quiso dar ningún detalle sobre las orientaciones que podría seguir la futura reforma y se limitó a señalar que «el mundo cambia y la PAC también lo va a hacer, lo cual no significa menos atención por el mundo rural, sino todo lo contrario».
Desde hace años la PAC vive en casi permanente proceso de reforma cuya consecuencia más visible es la reducción del porcentaje del presupuesto comunitario dedicado al gasto agrícola: pasará del 60% de hace veinte años al 40% a finales de esta década.