Iñigo Díaz de Zerio y Markel Bergara, llamados a ocupar el sábado en Las Palmas las plazas de los lesionados Skoubo y Garitano, coincidieron ayer al afirmar que el problema principal de la Real está en la cabeza de los jugadores y en entrar en una dinámica positiva de resultados.

El delantero recordó que el Almería comenzó con tres derrotas la pasada temporada y se contemplaba el cese de Emery antes de un partido vencido con colaboración arbitral y, a partir de ahí, el equipo entró en una racha positiva que le llevó a subir a falta de cinco jornadas y a aventajar al final en 17 puntos al cuarto. Para ello es clave que el equipo coja la confianza que no tiene y que dan los resultados.

Díaz de Zerio reconocía que «nuestro problema, más que de juego, está en la cabeza. Muchas veces parece que no nos creemos que somos jugadores válidos y lo hemos demostrado. Hay que darle la vuelta mentalmente a la situación, encadenar varias victorias seguidas para cargarnos de moral y, a partir de ahí, coger la ola que deseamos».

También admitía que «contentos no estamos porque el inicio ha sido decepcionante, pensábamos que los resultados iban a acompañar más. Pero hay experiencias anteriores y si empiezas mal se puede acabar bien. Hay que ser positivos. ¿Por qué no vamos a ganar dos partidos seguidos? Eso nos impulsaría a que las cosas vayan mejor».

Consideraba clave en Segunda hacerse fuertes en casa, pero reconocía también que el equipo juega más cómodo fuera que en Anoeta: «Es evidente que el equipo se ve más tensionado por el ambiente en general. No sé si no nos ayuda. Tampoco pido nada a la gente, cada uno es libre de expresar lo que quiera. Nosotros debemos olvidar ese ambiente y centrarnos más. El equipo está capacitado para llevar el peso del partido, vamos mejorando y fuera de casa sí se nos ve más cómodos porque jugamos con menos presión».

Dentro de lo positivo del domingo, quizás lo más destacado fue su actuación, mucho mejor que en un partido inaugural en el que jugó en un puesto donde dejó claro ayer que no se encuentra cómodo. El delantero reconoció que físicamente está mucho mejor, se le vio con esa confianza que falta al equipo y eso es una buena noticia porque la trayectoria de Delibasic y Skoubo en las últimas campañas y sus problemas con las lesiones invitan a dudar sobre ambos e Iñigo tiene mucho gol y buenos movimientos y, a falta de grandes recursos técnicos, una cabeza ideal para sacar el máximo de los que tiene.

Markel y «el organizador»

También tiene una buena cabeza Markel Bergara, y por eso cabe esperar que no le afecte esa búsqueda de un «organizador» que se ha puesto de moda en el entorno de la Real en el imposible objetivo de encontrar un jugador como Xabi Alonso. En su día se le puso esa presión a Elustondo y no le ayudó nada y ahora le toca a Markel, cuando son dos jugadores con muy buenas cualidades para jugar de pivote defensivo, pero que no encajan para nada en esa figura del organizador. Además, en Segunda lo importante es que los pivotes presionen bien y aprieten y jueguen fácil el balón, lo que mejor hacen Markel y Elustondo.

Ante esta búsqueda, el elgoibartarra dijo ayer que «no me siento presionado. Para mí es una oportunidad bonita estar disponible para el mister. No es presión, es una ilusión. Cuando logremos resultados seguro que nos olvidamos del organizador. Lo importante en Segunda es coger una dinámica positiva. Todos los partidos son muy nivelados sin grandes diferencias y hay que coger una racha positiva, que nos sintamos con confianza. Es la mayor virtud para ganar partidos en Segunda».