Lo que el euskara necesita es apoyo y herramientas para salir de la zona de peligro
El consejero de Educación del Gobierno navarro ha presentado esta semana sus líneas de actuación en torno al euskara. Tal vez por primera vez, el Ejecutivo presidido por UPN plantea líneas de actuación en positivo en este terreno, a pesar de lo cual, la nueva legislatura no ha hecho más que empezar a andar, por lo que habrá que ver como se plasman en la práctica esas intenciones. Porque aunque ya era hora de arrinconar el discurso agresivo y negador de los derechos de los euskaldunes en Nafarroa, el euskara necesita medidas efectivas, el apoyo del conjunto de la sociedad y las herramientas necesarias para desarrollarse y poder así salir de la zona de peligro en la que todavía continúa. En este contexto de cierta recuperación del espacio que el euskara debiera tener en la sociedad navarra, la propuesta de colaboración lanzada por Lakua ha sido rechazada por algunas fuerzas políticas como injerencia, lo que no puede sorprender. Al contrario, viene a recordarnos que aún está muy lejano para algunos el momento en que se asuma que el euskara es patrimonio de más de un territorio y que el trabajo conjunto no haría sino fortalecer los muchos esfuerzos que aún quedan por hacer.