Etxerat intentará reunirse el lunes con Ibarretxe para que adquiera «compromisos»
Una delegación de la asociación de familiares de presos y exiliados políticos vascos acudirá el lunes por la mañana a la Presidencia del Gobierno de Gasteiz con la intención de mantener una reunión con Juan José Ibarretxe, a fin de que Lakua adquiera «compromisos» para acabar con la política penitenciaria, en vez de enviar a la Ertzaintza a reprimir las manifestaciones en las que se exige el cumplimiento de los derechos de los presos políticos vascos.
Manex ALTUNA |
Etxerat informó ayer en una rueda de prensa realizada en Donostia que el lunes una delegación de la asociación de familiares de presos acudirá a Gasteiz para intentar reunirse con el lehendakari, Juan José Ibarretxe, e instarle a que el Gobierno de Lakua cambie de actitud con respecto a la política penitenciaria. En concreto, los familiares de presos reclamarán a Ibarretxe que adquiera «compromisos efectivos» para acabar con «esta cruda realidad que padecemos» y que, por lo tanto, en vez de «enviar a la Ertzaintza a golpearnos cada vez que nos manifestamos» los representantes del Ejecutivo autonómico acudan a esos actos.
En representación del colectivo de familiares de presos y exiliados vascos, Estanis Etxaburu recordó de que la situación que están padeciendo es «aún más insoportable», porque cuando el pasado domingo intentaron «denunciar en la calle una política penitenciaria que no hace más que vulnerar los derechos, somos golpeados por parte de aquellos que no han adquirido ningún compromiso para poder poner fin» a la misma.
Etxaburu estuvo acompañado por familiares de presos políticos vascos durante la comparecencia, y Jon Ijurko y Josune Dorronsoro tomaron la palabra y denunciaron mediante la lectura de un comunicado en euskara y castellano que «tenemos encendidas constantemente las luces de alarma porque es cada vez mayor el riesgo de padecer nuevas muertes».
«Es insoportable»
Los miembros de Etxerat explicaron que la situación que están padeciendo «es insoportable» porque «las consecuencias de la actuación de los Estados sobre nuestros familiares presos son realmente graves e inquietantes. Les producen graves problemas de salud, tanto físicos como psicológicos, manteniéndolos en unas muy duras condiciones de vida; sin poner en libertad a los presos que han cumplido las condenas impuestas».
Además, advirtieron de que «cada vez los trasladan más lejos de casa y ante ello es aún mayor el riesgo de perder incluso la vida para los familiares y allegados que hemos de recorrer miles de kilómetros».
Por ello, señalaron que llevan intentado desde hace tiempo que «distintas instituciones y agentes adquieran compromisos», y recordaron que el último ejemplo de ello se dio el pasado domingo en Arantzazu cuando se acercaron a la portavoz del Gobierno de Lakua, Miren Azkarate. Sin embargo, desde Etxerat mostraron su preocupación por la respuesta obtenida, puesto que «dos horas más tarde cuando miles de ciudadanos de este país pretendían manifestarse en Donostia fueron brutalmente golpeados».
«Han traspasado las líneas»
Ijurko y Dorronsoro censuraron en nombre de Etxerat la detención y «entrega de Juan Mari Olano a la Audiencia Nacional para que fuera encarcelado» porque es «un ejemplo de enorme valor solidario y comprometido que en todo momento lo hemos tenido a nuestro lado».
A juicio del colectivo de familiares de presos políticos vascos, la actuación de la Ertzaintza «ha traspasado las líneas rojas con esa terrible violencia ejercida y con ese terror en contra de todo acto convocado», y criticaron que la actitud de Lakua consiste en «golpearnos brutalmente cada vez que los ciudadanos de este país convocan y realizan actos para denunciar esta política penitenciaria».
«Es la clara imagen de aquél que defiende y apuesta firmemente por nuestra soledad, nuestro silencio y, a su vez, causar muertes entre los presos y sus familias», criticaron en alusión al Gobierno de Gasteiz.
Los representantes de Etxerat aseguraron que no están «dispuestos a permitir tanta barbaridad» y que, por ello, intentarán reunirse con Ibarretxe «para dar cuenta de nuestra realidad y a la vez exigirle que termine con el terror que ocasiona la Ertzaintza bajo las órdenes de su Gobierno».
«No deseamos la presencia armada de los ertzainas en las manifestaciones, es más, deseamos la presencia del señor Ibarretxe, Azkarraga, Madrazo y demás políticos responsables en los actos que se convocan en defensa de los derechos de los presos», añadieron los portavoces del colectivo, que ya ha remitido una carta al lehendakari para notificar sus intenciones.
Asimismo, realizaron un llamamiento a los ciudadanos de Euskal Herria para que «siga manifestándose en contra de la asesina política penitenciaria que aplican los Estados francés y español» porque «no se trata de legalidades o ilegalidades, sino de la imperiosa necesidad de salvar las vidas de nuestros familiares y las nuestras propias».
El movimiento pro-amnistía había convocado ayer una concentración frente a la sede de NaBai, pero la Policía española ocupó la plaza del Castillo. Los convocantes crticaron la actitud del delegado del Gobierno español, Vicente Ripa.