Cinco puntos en otras tantas jornadas es un balance que no permite respiros. La necesidad de los puntos sigue intacta, para lograrlo los rojiblancos deberán desplegar el mismo derroche físico que ante el Atlético, donde los jugadores se dejaron todo sobre el césped y nunca perdieron la cara al partido. A pesar de ello, en líneas generales no hubo acierto en el campo, ni tampoco desde el banquillo a la hora de tomar decisiones que variasen el rumbo del choque.

El Athletic es un equipo en construcción, no en vano todavía cuenta con las importantes ausencias de Yeste, Orbaiz y también de Gabilondo, y que viene de dos temporadas donde el sufrimiento ha imperado. Para evitar tantos apuros, la inversión realizada en reforzar la plantilla ha sido importante y en el computo global el conjunto tiene bastante más potencial que en años anteriores. Sin embargo, las dudas persisten y Caparrós continúa sin dar con las teclas idóneas para que el juego mejore. En su descargo hay que decir que su equipo está vivo y que hasta el momento no ha bajado los brazos.

Repaso por líneas

Dentro del grueso del equipo, una figura emerge por encima del resto: Gorka Iraizoz. El navarro está haciendo méritos más que suficientes para ser considerado el fichaje más importante de los últimos años. Su seguridad, colocación, juego aéreo y las manos salvadoras que está sacando le avalan.

En ese sentido, llama poderosamente la atención, y dice mucho de la forma de defender del equipo, que en multitud de acciones el meta atrapa el balón y es el primero en salir para lanzar la contra, pero tiene que recular debido que tiene a todos los compañeros a su espalda. Lo cual no deja de ser la consecuencia directa defender con once hombres en el área las acciones a balón parado.

En defensa, hasta el momento han jugado únicamente tres centrales. Las expulsiones de Ocio y de Amorebieta han propiciado la participación de Ustaritz. El de Matiena empezó titubeante ante el Atlético pero fue a más según avanzó el choque. No tenía una papeleta fácil, está faltó de ritmo y el mensaje colateral de desconfianza hacía su alineación que se envió desde el club y cuerpo técnico al pedir la cautelar para Amorebieta no le dejaban mucho margen de maniobra. Ahora, todo parece indicar que una vez cumplida su sanción el de Iurreta vuelva al once titular. Esperemos que rindiendo como ante el Levante.

Los laterales ofrecen más dudas, Andoni Iraola está lejos de su mejor momento. El usurbildarra es un jugador con mucha clase y tiene que recuperar esa confianza que le llevó a ser uno de los mejores, si no el mejor, lateral del campeonato. En similar tesitura se encuentra Asier Del Horno. En caso que ambos no respondan, seguro que Koikili y Expósito tratarán de aprovechar su oportunidad.

Para el centro del campo, más incógnitas y problemas. Y es que además de la lesión de Orbaiz, Caparrós no ha encontrado la formula. Ha variado hombres, para encontrar un resultado similar. Mientras tanto, Javi Martínez se ve obligado a realizar una sórdida labor defensiva, descargando a Ocio de su principal laguna como es la colocación, y muy lejos de su más que aprovechable vertiente ofensiva. Ante los colchoneros estuvo acompañado por un Muñoz que cumplió. Sin embargo, se volvió a notar la ausencia de un Tiko que volvió a estar 40 minutos calentando para no entrar.

Mención aparte merece David López, el ex de Osasuna no ha justificado todavía los 6 millones pagados por él. Es cierto que se deja todo sobre el campo y que se ofrece en todo momento, pero no ha brillado aunque cualidades para explotar tiene.

Arriba, la sorpresa agradable se llama Ion Vélez. El de Tafalla está ganándose el puesto con sus buenas actuaciones. La única pena es que aún no haya podido abrir su cuenta goleadora. Por su parte, Aduriz sigue mostrando sus virtudes de siempre, mientras que Etxebe está dejando buenas sensaciones también. Llorente marcó el miércoles, pero incomprensiblemente le anularon el gol, y ojala siga en mejor línea que la mostrada en partidos anteriores.