El pleno del Congreso de los Diputados dio ayer luz verde a la reforma del Código Penal en materia de Seguridad Vial, que persigue endurecer las sanciones por conducción temeraria con penas de cárcel, en los casos más graves.

La propuesta aprobada en las Cortes españolas pretende, en concreto, elevar las faltas a delitos en casos concretos de exceso de velocidad (conducir a más de 200 kilómetros por hora en autovía y a más de 180 en carretera y 110 en vía urbana) y por consumo de alcohol (más de 1,2 gramos de alcohol en sangre).

El director general de Tráfico, Pere Navarro, consideró que «es un elemento para prevenir accidentes, como el permiso por puntos». Sin embargo, desde las asociaciones de automovilistas rechazaron la reforma al considerar que no servirá para terminar con el alto número de accidentes.