La demagogia sobre las salidas nocturnas de los futbolistas ha vuelto. Ayer, el periódico más vendido en Bizkaia, a través de una filtración, aseguró que desde Ibaigane se va a apercibir a dos integrantes de la plantilla por haber participado en una fiesta celebrada en una discoteca de Deustua.

El hecho de que dos jugadores, jóvenes y con derecho a divertirse pero que cobran muchísimo más que la inmensa mayoría de los chavales de su edad, salgan cuando no tienen permiso no deja de ser censurable, pero no le da permiso a nadie para ir a insultarles a Lezama. Pero en lo que realmente habría que reparar es en el interés de algunos en dar tanto bombo y platillo a dicha «noticia». Está claro que hablar de ello vende, pero no deja de ser un ejercicio de telebasura. Removiendo dentro del contenedor y sacando la basura hacia fuera no se consigue otra cosa más que poner en entredicho a dos profesionales del club y enturbiar la imagen de la propia institución.

No sólo eso, además de la citada información, desde ese mismo grupo editorial también se emitieron imágenes nada beneficiosas del entrenamiento del pasado miércoles. Pensándolo un poco, tal vez lo que interese es generar un caldo de cultivo que sirva como terapia de choque ante un no deseable mal resultado el domingo. Todo porque nadie duda de que es más fácil hablar de las supuestas `juergas' que de la falta de un proyecto dentro del club.