El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, recibió ayer en el Palacio de Miraflores al delegado del presidente francés, Nicolás Sarkozy, para hablar de la mediación que está realizando el líder bolivariano entre el Gobierno colombiano y las FARC para un acuerdo de intercambio de prisioneros.

El enviado de Sarkozy es Daniel Parfait, director para las Américas y el Caribe del Ministerio francés de Exteriores, quien fue recibido por el jefe de Estado en su despacho.

Parfait, quien también fue embajador francés en Colombia y además es cuñado de la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt, llegó al país el martes y sostuvo una reunión previa con el ministro de Asuntos Exteriores, Nicolás Maduro.

El semanario francés «Paris-Match» publicaba ayer una entrevista a Chávez en la que admite que va a recibir a emisarios de alto nivel de la guerrilla, ante los que va a presentar «ideas y fórmulas» que hasta ahora no ha «desvelado a nadie».

El propio mandatario venezolano aseguró la víspera que la fecha inicialmente manejada para ese encuentro, el 8 de octubre, no ha sido aún confirmada.

Uribe torpedea

El anuncio coincide con el hasta ahora último intento por parte del presidente colombiano, Alvaro Uribe, de torpedear estas negociaciones.

Así, y ante la presencia del jefe del Pentágono, Robert Gates, de visita en Colombia, Uribe aseguró que los líderes de la guerrilla de las FARC presos en EEUU, Simón Trinidad y Sonia, no entrarán en ningún caso en un intercambio de prisioneros.

Este anuncio, recogido con regocijo por Washington, amenaza con retrasar el encuentro en Caracas. Así lo declaró ayer la senadora colombiana Piedad Córdoba, que participa en la mediación.

Las FARC incluyen a ambos líderes en la lista de 500 guerrilleros presos cuya libertad exigen a cambio de la de 45 de sus rehenes.