Las universidades Autònoma de Barcelona, de Alacant, de Girona, de València, de Lleida y la Rovira Virgili de Tarragona acogieron ayer al mediodía movilizaciones en apoyo a los procesados por quemar retratos del rey español, Juan Carlos Borbón. En algunas de estas movilizaciones, como la de la Universitat Autònoma de Barcelona, volvieron a quemarse más imágenes. Para los próximos días se han convocado más movilizaciones en distintas ciudades de los Països Catalans.

Por otra parte, el juez de la Audiencia Nacional española Fernando Grande-Marlaska dejó ayer en libertad a los nueve jóvenes que fueron identificados por los Mossos d'Esquadra como autores de una segunda quema de fotos de Borbón que se registró el 22 de setiembre en Girona, porque el fiscal no ha solicitado ninguna medida.

El fiscal Luis Barroso justificó esta decisión con el argumento de que estos hechos son diferentes a los protagonizados por Jaume Roura y Enric Stern el 13 de setiembre, cuando sí pidió medidas cautelares.

Ocho de los ciudadanos catalanes han sido imputados por quemar fotos, mientras que un noveno, que leyó el comunicado de la concentración, fue acusado de «inducción». Una décima persona declarará el lunes ante Grande-Marlaska.

Mientras se producía la comparecencia, decenas de independentistas catalanes, con el apoyo de miembros de Izquierda Castellana y de Corriente Roja se concentraron en la Plaza de Colón de Madrid. Un grupo de falangistas se colocó ante ellos profiriendo insultos y mostrando banderas franquistas.