GARA > Idatzia > Kultura

«Translatines es un festival de riesgo. Si perdemos eso, perdemos nuestra alma»

p056_f01_148x104.jpg

Jean-marie broucaret

director del festival de teatro latinoamericano

No tiene empacho en inaugurar el festival travestido en uno de los personajes del irreverente Copi, porque el teatro es juego. Director de Les Translatines, el festival de teatro latinoamericano de Baiona y Biarritz, es todo menos acomodadizo y sabe mucho, pero mucho, de teatro.

Amaia EREÑAGA | BAIONA

Conseguir un público fiel que se «enganche» año tras año a las propuestas nada convencionales que le ofreces y, además, con la dificultad añadida de que son en otro idioma y con traducción simultánea, no es nada fácil. Pero desde hace varias décadas, Les Translatines y el grupo teatral labortano Les Chimères lo consiguen. Jean-Marie Broucaret, fundador y director de ambas iniciativas, es toda una institución en esto del teatro entre nosotros, aunque probablemente a él eso de ser una institución no le guste. Metido en la locura de ultimar el festival, pelea por la continuidad de esta gran fiesta teatral, que se encuentra en plena etapa de transición.

Arranca la edición 27 de Les Translatines, un festival que, en sus propias palabras, corre serio peligro de desaparecer.

Es un riesgo bastante importante, porque desde hace años no han aumentado las subvenciones públicas. Por parte de Baiona sí notamos un interés especial, pero las ayudas del consejo regional o departamental siguen invariables y estamos ahogados, porque la vida sube. Nuestra solución, como no creemos que vayan a darnos mucho más dinero, es que el ritmo del festival baje a dos años; es decir, que se convierta en bianual. Pero para ello sería necesario que las subvenciones anuales fueran acumulándose. Además, nos daría tiempo para organizar el festival de una manera muy tranquila. Es la solución menos mala y, si lo conseguimos, el festival puede tener una segunda vida, más fuerte que la primera. Pero depende de los políticos.

Además, su compañía, Thêatre des Chimères, tiene que abandonar su sede de Biarritz (Les Decouvertes) en 2009 por problemas económicos. Están en un momento de cambio total.

Todo resulta un poco incierto.

Es una pena que las instituciones no apoyen estas iniciativas. Es lo que pasa con la cultura.

Sobre todo en estos tiempos, en los que hay problemas económicos por todos lados. Por ejemplo, ahora que se está produciendo un envejecimiento de la población, se necesita destinar más dinero a ese segmento y crear otra organización social. Y como el dinero no cae del cielo, la cultura pasa al final de la lista de las prioridades.

Van a terminar pidiéndoles resultados, como si fueran una empresa.

El actual presidente de la República nos los pide y eso resulta muy peligroso para la cultura, porque ya se sabe que existen recetas para obtener resultados, pero que no incluyen el riesgo. Te da miedo, porque, por ejemplo, un festival como el de Baiona es una iniciativa vanguardista, de riesgo. Y si tenemos que perder ese factor de riesgo, perdemos nuestra alma.

Una pregunta que surge es por qué esa querencia hacia Latinoamérica. En Biarritz también hay un Festival de Cine y Culturas Latinoamericanas.

Cuando nosotros empezamos en los años 80, fue sobre todo con ese viento de modernidad que llegaba de Catalunya. Y nos hemos apoyado mucho en eso para construir la identidad del festival. Era la época de La Fura dels Baus, también de Els Joglars, aunque ya existía anteriormente. Los años fueron pasando, también aumentaba la implantación en el público y el patrocinio oficial nos permitió pensar en América del Sur, casi diez años después. Empezamos a mantener relaciones con Argentina, Chile y, de forma más estrecha, con Bolivia y el Teatro de los Andes. El teatro latinoamericano tiene una peculiaridad que nos interesa mucho: su relación con lo político. En Europa pensamos que nada funciona, estamos como durmiendo políticamente y ellos, que han conocido situaciones muy duras, traen una energía frente al mundo que nosotros, en nuestros países, no tenemos.

ATÍPICO

«Nuestra razón de existir es hacer descubrir obras que no se podrían ver si no existiera este festival. Si una obra latinoamericana funciona bien en el circuito francés, no la invitamos»

OBREROS

«Dar cursos, organizar un festival o interpretar una obra es, para nosotros, el mismo trabajo. Tenemos una concepción muy abierta de la labor teatral. Como decía Bertolt Brecht, el actor es también un obrero»

«Hemos peleado para invitar a Rodrigo García»

Esta noche se convierte usted en un maestro de ceremonias nada convencional, porque representa «Le vieux travelos», de Copi, en la inauguración.

Es una pequeña broma, porque esa pequeña obra me gusta mucho interpretarla y el público disfruta con el personaje. Dura veinte minutos y luego presento el festival con el personaje de la obra, con el travesti, con su acento particular. Me da mucho placer hacerlo y también sirve de ligazón entre todas las facetas del teatro, que es como nosotros lo vemos: organizar el festival, actuar... todo unido con la diversión.

Arriésguese y cíteme dos obras a no perderse.

Difícil pregunta. Voy a hablarte de dos obras que piden ambas que el hombre tenga una dimensión humana. Una, la del César Brie, del Teatro de los Andes, que habla de Marcelo Quiroga, un personaje emblemático asesinado por la dictadura en Bolivia de 1980. César Brie habla de la pareja que formó con su mujer y de su lucha, pero la fuerza de este espectáculo es que busca la parte íntima de esa pareja, del amor que se tenían, y lo extiende al género humano. Son dos actores con dos gradas en cada lado, y con una intimidad y una emoción... es una joya. Por otro, tenemos a Rodrígo García, al que conocemos bien con su provocación continua. Tiene un espectáculo muy difícil y muchas exigencias técnicas. Hemos peleado para invitarlo porque presenta al hombre en el mismo estado que las aves llenas de chapapote, pero no está contaminado por el petróleo, sino por el consumo. Y la pregunta es ¿en todo esto, dónde está lo humano? Ambos plantean una reflexión sobre el porvenir del ser humano bastante pesimista, pero que te da como un golpe eléctrico y no puedes sentirte a salvo.

A.E.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo