Morales y Menchú instan a ratificar la Declaración de los Derechos Indígenas
El presidente de Bolivia, Evo Morales, y la Nobel de la Paz guatemalteca, Rigoberta Menchú, exhortaron a los gobiernos del mundo a reconocer e incorporar en sus legislaciones la reciente Declaración de los Derechos de los Pueblos Indígenas aprobada por Naciones Unidas.
GARA |
Evo Morales y Rigoberta Menchú formularon este llamamiento durante la apertura en La Paz del Encuentro por la Victoria Histórica de los Pueblos Indígenas del Mundo, en el que participan delegaciones de los pueblos originarios de los cinco continentes y en que se celebrará la aprobación, el 13 de setiembre por la ONU, de la Declaración de los Derechos de los Pueblos Indígenas, que protege los derechos humanos, la tierra y los recursos de los indígenas del mundo y que es resultado de veinte años de debate en el organismo internacional. «Aquí comienza una nueva lucha para que la Declaración sea ratificada por los congresos y aplicada por todos los estados», indicó Morales, al tiempo que recomendó al Parlamento Indígena iniciar un periplo para favorecer esa tarea.
«Yo quiero pedir de manera personal y de este movimiento a todos los presidentes y estados que de manera inmediata ratifiquen y aprueben los derechos de los pueblos indígenas del mundo», señaló el presidente boliviano, el primer indígena que gobierna el país. Añadió que el siguiente paso en esta lucha debe dirigirse a derrotar el «capitalismo salvaje», el «colonialismo», a recuperar los recursos naturales y a demandar que los servicios públicos como el agua sean reconocidos como «derechos humanos».
Tras mencionar la larga batalla en la ONU para lograr el reconocimiento de los derechos de los indígenas, Menchú dijo que en cierta forma Morales encarna esa aspiración y lo llamó presidente de todos los indígenas del mundo. «Sólo un hermano presidente puede sentarse al lado de altos mandatarios, y nosotros somos sus embajadores», manifestó la Premio Nobel.
La líder indígena guatemalteca aseguró que la aprobación de la Declaración «no es el final de la lucha, sino el comienzo de una lucha más grande, que es que nadie se quede atrás y todos caminemos juntos. «Debemos hacer que se aplique en nuestros países luchar porque se apruebe una Convención Internacional», sostuvo. Reprochó a EEUU, Canadá, Australia y Nueva Zelanda su oposición a la Declaración.
El Encuentro Mundial comenzó en La Paz, capital boliviana, y tras trasladarse ayer a las ruinas de Tiwanaku, finalizará hoy en la región cocalera de Chapare. La cita culminará hoy, 12 de octubre, cuando se cumplen 515 años de la resistencia indígena ante la llegada de los colonizadores españoles.
Se calcula que actualmente en el mundo habitan 370 millones de miembros de etnias originarias, 50 millones de los cuales viven en América Latina.