Cuatro y Medio
Sebastien Gonzalez sufre a causa de su mal endémico
La irregularidad en su juego, unida a la resistencia de Iñigo Leiza, puso al de Azkaine contra las cuerdas. Pese a realizar la friolera de 21 tantos ganadores, certificó su victoria gracias a un parcial final de 4-0.
Aritz SORZABAL | EIBAR
Sebastien Gonzalez es capaz de lo mejor y de lo peor en un mismo partido, más aún si, como advirtió el día de la elección de material, llega a un campeonato tan específico como el del Cuatro y Medio tras haber realizado tan sólo dos entrenamientos en la distancia. Entre su habitual irregularidad y esa falta de adaptación a la jaula, Gonzalez sufrió más de la cuenta ante un Iñigo Leiza que salió a la cancha con las ideas claras.
El vizcaino era consciente de que el de Azkaine tiene calidad suficiente para firmar un gran número de tantos ganadores -realizó la friolera de 21-, pero también sabía de la irregularidad de su rival -cometió 11 errores, incluidas cuatro pasas-, así que saltó a la cancha con la intención de apretar los dientes en defensa y esperar su oportunidad. Y la tuvo, ya que el luminoso señalaba un empate a 18 cuando se habían disputado cincuenta minutos de juego.
Leiza había sido capaz de levantar hasta siete tantos de desventaja (14-7) y darle la vuelta a un choque que se le había puesto cuesta arriba tras el demoledor comienzo de Gonzalez. El labortano sacó a relucir su látigo y sumó un sinfín de voleas de zurda que murieron en el ancho, con su oponente haciendo la estatua. Así llegaron el 8, 9 y 10-4, así como el 13-7 que dejaba el encuentro muy encarrilado para sus intereses. Gonzalez también había deleitado para entonces con una precisa dejada desde el tres (7-3), aunque asimismo había mostrado su irregularidad con dos pasas.
0-6 favorable a Leiza
Uno de los pocos errores de Gonzalez con su mejor jugada -volea de zurda al ancho-, sirvió para devolver la iniciativa a Leiza. El de Lemoa encadenó un parcial de 0-6 y se colocó a un tanto (14-13). Gonzalez, que se había ido del partido, volvió a él y se fue de nuevo hasta el 17-13, pero Leiza también demostró que tiene calidad.
Una dejada al txoko -en el 14-9 ya había enviado una al ancho que se llevó muchos aplausos- y un dos paredes le volvieron a meter en el encuentro hasta el punto de ser capaz de empatarlo, merced también a dos nuevas pasas del colorado -una tras el segundo saque-.
Pero ahí se acabó el sueño de Leiza. Gonzalez aparcó su irregularidad y sacó de nuevo el látigo. Un dos paredes, dos voleas al ancho y un tanto de saque le condujeron directamente al cartón 22.
El de Azkaine se enfrentará a Juantxo Koka en octavos de final. Un choque muy abierto si Gonzalez continúa mostrándose tan irregular.
22
18
El choque entre Gonzalez y Leiza tuvo un aperitivo de lujo. Para abrir boca, Titín III-Laskurain y Martínez de Irujo-Goñi III protagonizaron un partido tan eléctrico como apretado, en el que la victoria cayó finalmente del lado de los azules (21-22).
Los cuatro pelotaris rindieron a un gran nivel, pero si habría que destacar a alguno sería a Aritz Laskurain. Pese a que al final el triunfo no le sonrió, el zaguero de Soraluze completó un partido soberbio tanto en defensa como en ataque. Mandó una pelota al rebote para colocar la máxima ventaja del choque para cualquiera de las dos parejas (11-7) y hasta se atrevió a subir a los cuadros alegres para sellar un dos paredes digno del mejor delantero (13-10).
A.S.
