Final de la Copa del Mundo
Grandes pateadores... y mucho más
Sudáfrica se alza con el título con su consistencia por bandera ante una Inglaterra incapaz de hallar huecos en la defensa rival
Imanol INTZIARTE | DONOSTIA
El rugby es un deporte en el que el protagonismo recae habitualmente en los pateadores. Por algo son quienes anotan la mayor parte de los puntos. Ocasionalmente son eclipsados por algún jugador de la línea de tres cuartos que anota varios ensayos al galope. Sudáfrica tiene ambas cosas. Pero también muchas más, y por eso es campeona del mundo.
Montgomery y Stein patean, Habana, Fourie o Pietersen corren como los antílopes que adornan su pechera. Pero cuentan sobre todo con una delantera capaz de batirse el cobre durante los ochenta minutos sin tomarse un respiro, ganando balones y arrancando golpes de castigo para el lucimiento de sus figuras.
Enfrente, una Inglaterra que se aferraba al acierto de Wilkinson para revalidar el título. En sus tres últimos partidos, los europeos sólo han sido capaces de anotar un ensayo. Fue contra Francia y debido a un error de Traille. Ayer tuvieron una sola oportunidad que el árbitro anuló al estimar que el jugador había tocado la línea de banda antes de posar el balón.
Han realizado un Mundial de menos a más, elevando el nivel de su defensa para compensar sus carencias ofensivas. Pero este bagaje no fue ayer suficiente para derrotar a Sudáfrica. Se quedaron más cerca que en el humillante 36-0 de la primera fase, pero la Copa Webb Ellis regresó al hemisferio sur.
El choque comenzó con ambas escuadras dedicándose en cuerpo y alma a la ardua tarea de desgastar al rival. Se venía hablando de la importancia de la lucha entre la delanteras y Sudáfrica comenzó comiéndole la tostada a Inglaterra en las dos primeras touches lanzadas por Regan. Un anuncio de lo que estaba por venir.
Un resbalón de Tait devino en golpe de castigo en contra por retener el balón en el suelo. Corría el minuto 6 y Sudáfrica cobraba ventaja (3-0). Era tan sólo el primer plato del duelo entre pateadores: Wilkinson por Inglaterra, Montgomery -zurdo- y Stein -diestro- por Sudáfrica.
Choque de trenes
El apertura de la rosa acertaba un golpe con escaso ángulo y erraba poco después un intento de drop. El segundo golpe del máximo anotador del torneo -Montgomery- precedía a un error de su compañero.
Eran las únicas pausas que se tomaban los dos conjuntos. El partido era para fajadores, a la espera de que el transcurrir de los minutos creara unos huecos que nunca llegaron.
No hubo ocasiones para ensayar hasta la recta final de la primera mitad. Sudáfrica acechó a la línea de marca rival durante cinco minutos, pero sin lograr apoyar el oval. Al menos no se fueron de vacío, porque el colegiado sancionó un golpe de castigo que Montgomery envió entre los palos. 9 a 3 para los springboks y los dos quinces a vestuarios.
Para que nada faltase, la reanudación trajo bajo el brazo una jugada para la polémica. El árbitro, a instancias de su asistente televisivo, anuló un ensayo inglés tras un grandioso slalom de Tait. Del mal el menos, porque Wilkinson dispuso de un golpe de castigo para recortar distancias (9-6, min. 43). Pero no era suficiente, y menos cuando los dos pateadores sudafricanos seguían martilleando sin remisión (15-6, min. 60).
Obligado por las lesiones en algunos casos, en otros buscando frescura, el técnico ingles, Brian Ashton, se montó en el carrusel de los cambios. Por contra, su homólogo sudafricano se mantenía impasible y sólo varió a uno de sus hombres. Fue en el minuto 72.
A los vigentes campeones se les escapaba poco a poco la opción de revalidar lo conseguido en 2003. Fue, en términos del mus, una «muerte dulce». Casi a la desesperada, Wilkinson intentaba un drop que se quedó corto. Sudáfrica tenía los deberes hechos y se trataba de dejar que la rosa se fuera marchitando con el transcurrir del reloj.
Sudáfrica ha logrado, tras el de 1995, su segundo título mundial. Australia también tiene dos. Nueva Zelanda e Inglaterra, por su parte, cuentan con un entorchado en sus vitrinas.
Dos sudafricanos lideran las listas de anotadores y ensayos. El zaguero Percy Montgomery ha anotado 105 puntos, mientras que Bryan Habana ha posado el balón en la zona de marca rival en ocho ocasiones.