ASAMBLEA DE LA RED GERNIKA
Gernika, sede de una alianza por la autodeterminación
Los parlamentarios y electos de Alemania, Escocia, Flandes, Irlanda y Països Catalans que han participado durante estos días en la primera Asamblea de la Red Gernika informaron ayer de que tratarán de «expandir a nivel internacional» sus postulados. Con ese objetivo, promoverán una serie de iniciativas concretas para «defender el derecho de autodeterminación de Euskal Herria en diferentes instituciones y organismos internacionales».
Manex ALTUNA | GERNIKA
La Red Gernika por la Autodeterminación, que está compuesta por parlamentarios y electos de distintos países europeos, ha celebrado su primera asamblea en la localidad vizcaina durante los últimos tres días.
La iniciativa fue presentada el pasado 25 de abril, coincidiendo con los actos organizados por la iniciativa popular Gernika Batzordea en conmemoración del 70 aniversario del bombardeo de la villa foral. Surgió con la idea de actuar a nivel internacional en favor del reconocimiento del derecho a la libre determinación de Euskal Herria, tal y como incidieron en la declaración conjunta suscrita ayer por los integrantes de la Red.
Los representantes políticos europeos que han participado durante estos días en las jornadas han sido Michael Leutert -parlamentario alemán por el partido Die Linke en el Bundestag y miembro de la Comisión de Derechos Humanos-, Jan Loones -diputado flamenco que por la tarde visitó a Arnaldo Otegi-, Lloyd Quinan -ex miembro del Parlamento escocés por el SNP y participante de la iniciativa por la consecución de la independencia de Escocia-, Francie Brolly -miembro del Parlamento de Stormont en nombre de Sinn Féin- y los concejales por la Candidatures d'Unitat Popular (CUP) en diferentes localidades de los Països Catalans Otger Amatller, Laia Jurado, Ana María Guijarro y Anna Gabriel.
La Red está compuesta también por miembros de otros países como Dinamarca, Italia, Corsica, Galicia, Bielorrusia y Andalucía, cuyos representantes no han podido participar directamente en esta asamblea, pero han enviado su adhesión y apoyo a la iniciativa.
Los políticos europeos fueron recibidos ayer por la mañana en el Ayuntamiento de Gernika por el gobierno municipal, conformado por EA y ANV, y miembros de Gernika Batzordea, en un acto al que también asistieron los representantes de la izquierda abertzale Karmelo Landa y Eusebio Lasa.
Las autoridades locales dieron la bienvenida a los representantes europeos y señalaron en el discurso -que leyeron en euskara, español, francés e inglés- que «es un honor para nosotros recibir a representantes de tan diversos pueblos, pero que tienen un objetivo en común».
«Como sabéis, hace setenta años las bombas fascistas destruyeron esta ciudad. Pretendían destruir Gernika-Lumo y su árbol, símbolo de las libertades de los vascos. Murió mucha gente, pero los vascos seguimos a día de hoy luchando en defensa de nuestros derechos hasta conseguir el derecho de autodeterminación. Queremos que sepáis que este equipo de gobierno hace nuestros vuestros objetivos», declararon.
Los parlamentarios y electos europeos asistentes, por su parte, señalaron en el comunicado al que dio lectura dentro del consistorio la concejal de CUP, Anna Gabriel, que la asamblea «ha servido para conocer de cerca la realidad de Euskal Herria y, sobre todo, para definir iniciativas conjuntas con el objetivo de defender el derecho de autodeterminación de Euskal Herria en diferentes instituciones y organismos internacionales».
Derecho a tener voz propia
Los portavoces de la Red Gernika recordaron cómo en el caso de Italia los senadores de Rifundazione Comunista y el partido de los Verdes han presentado ya una iniciativa en el senado en relación a la actual situación en Euskal Herria (información que se recoge en la página 11).
Asimismo, aseguraron haber tomado «el firme compromiso de expandir la red a nivel internacional, realizando nuevas adhesiones, con el propósito de impulsar una solución dialogada al conflicto y el reconocimiento al derecho de autodeterminación de Euskal Herria».
A este respecto, el representante escocés Lloyd Quinan resaltó la cercanía entre su país y Euskal Herria porque «queremos ser parte de la comunidad internacional y tenemos derecho a tener una voz propia en las Naciones Unidas».
Afirmó también que trabajarán «para que la ciudadanía de nuestros respectivos países entienda el conflicto político en Euskal Herria» porque «es una necesidad para todos nosotros defender los derechos humanos y políticos de todos los ciudadanos de todos los países en el mundo».
En este sentido, declaró que, hasta que se reconozca el derecho de autodeterminación, la democracia «no estará aquí viva». Concluyó su alocución diciendo que «ojalá en un futuro podamos celebrar la independencia de Escocia y Euskal Herria».
El parlamentario de la formación de izquierdas Die Linke en el Bundestag, Michael Leutert, añadió que como alemán se siente de alguna manera «responsable» por lo ocurrido hace 70 años en Gernika y que tanto él como su partido trabajan para que estos hechos no sean olvidados. «Los alemanes tenemos una responsabilidad histórica para contribuir a las resoluciones de los conflictos que vulneran los derechos humanos y espero que esta red pueda contribuir a reconstituir los derechos de este pueblo. Además, el año que viene se cumple el 50 aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos y se podría aprovechar esa efeméride para reivindicar los derechos de este pueblo», señaló.
Por su parte, el dirigente de Sinn Féin Francie Brolly hizo especial hincapié en la importancia de mantener vivas las diferentes lenguas del mundo, como el euskara o el gaélico, porque, según resaltó, éstas «representan el alma de la humanidad».
¿Qué valoración hace de la Asamblea que han realizado durante estos últimos días los integrantes de la Red Gernika?
Es muy importante promover este tipo de iniciativas para entender mejor lo que sucede en Euskal Herria y tratar de buscar soluciones al conflicto vasco trabajando de forma conjunta con otros parlamentarios y electos europeos. Europa debe considerar que el conflicto vasco es un problema interno.
¿Qué se puede hacer para conseguir la implicación de la Unión Europea?
Es una buena pregunta. El conflicto vasco no es un problema español o francés. España y Francia son dos estados importantes a nivel europeo, pero también Alemania. Tenemos la responsabilidad de ayudar, y también la izquierda europea debe implicarse en buscar una solución democrática al conflicto vasco. El partido al que pertenezco -Die Linke- está dentro del Partido Europeo de la Izquierda junto a otras muchas formaciones. Desde ahí debemos dar a conocer la situación del conflicto vasco y también desde nuestros parlamentos nacionales mandando cartas o proponiendo iniciativas acerca de la situación en Euskal Herria. El Dalai Lama, por ejemplo, está visitando Alemania en los últimos días y ha levantado un importante revuelo. Los medios hablan de que se puede perder la cultura e identidad de un pueblo como el de Tibet e, incluso, Angela Merkel se ha reunido con él. Me parece bien que se interesen por el Tibet, pero aquí dentro de Europa se da una situación similar y no se implican. Merkel nunca ha dicho nada sobre Euskal Herria y lo que hay que hacer es intentar darle la vuelta a esta situación.
¿Ve factible reconocimiento del derecho de autodeterminación de Euskal Herria dentro de la Unión Europea?
La autodeterminación es un derecho que ostentan todos los pueblos y Euskal Herria lo es. El problema es que a la hora de llevarlo a la práctica en este caso se debería de pactar con los estados español y francés. Sin embargo, veo difícil que lo aceptaran. Nuestro trabajo debe consistir en impulsar a nivel europeo que se busque una solución al conflicto vasco teniendo en consideración que debe ser reconocido el derecho de autodeterminación.
Pertenece usted a la Comisión de Derechos Humanos en el Bundestag, ¿qué lectura hace de la vulneración de derechos civiles y políticos en el Estado español?
España es la principal responsable de la conculcación de los derechos, pero Francia y la Unión Europea también tienen su parte. Hay una parte de la sociedad que reivindica la independencia y las consecuencias que sufren los que lo hacen se pueden comprobar con el encarcelamiento de toda una dirección de un partido político. Las personas que representan esas ideas son necesarias para tener una interlocución y trabajar por la paz. Parece increíble que a en Europa sucedan estas cosas o que se pueda torturar de forma sistemática pero, tras asistir como ojeador a los procesos por las movilizaciones contra el G-8 en Génova, creo que todo es posible.