Han pasado ya más de 100 días desde las elecciones al Athletic y hasta ahora había mantenido (y pretendía seguir haciéndolo) un lógico silencio por respeto la voluntad de los socios y socias, como no podía ser de otra manera. Pero la pasada semana se me ha involucrado en una supuesta (y falsa) acusación de intervenir para boicotear la reciente asamblea, en la que también los socios y socias dijeron no a las cuentas presentadas por la nueva Junta Directiva. Medité salir a aclarar este asunto 24 horas después de producirse, pero la semana llegaba cargada en el calendario para el Athletic con dos partidos importantes y por eso decidí esperar estos siete días para escribir esta carta abierta dirigida a don Fernando García Macua.

Y señor presidente, desde el respeto a la institución y al cargo que usted representa, reitero mi no personal ya reflejado en la asamblea tanto a la aprobación del balance de la temporada 2006/07 como al presupuesto de la 2007/08, atendiendo al propio criterio manejado públicamente por usted: sería una incongruencia votar sí a la primera y no a la segunda... Y negada la acusación (falsa) y reafirmada mi posición personal, me voy a permitir unas breves reflexiones pensando siempre en el beneficio del club y no en hurgar en las heridas abiertas años atrás por otros, pongamos por caso los increíbles, sorprendentes, costosos y altísimos blindajes a empleados del Athletic.

Presidente, usted tiene la oportunidad y el momento grave, pero histórico, de encontrar el camino con un casi nuevo equipo directivo, pero los socios y socias le pedimos ilusión y trabajo en nuestra institución. Ha fichado lo que ha necesitado para ganar las elecciones, incluso lo ha hecho más caro de lo que hubiera sido necesario. Y cargar ahora el esfuerzo económico del club en los socios y socias es lo fácil, lo cómodo desde una postura ni valiente ni innovadora. Para eso no hacían falta tantas alforjas. Los socios y socias somos una parte que tiene que colaborar, pero no la única. Y ni es éste el estilo que necesitamos ni lo es tirar de soberbia para para advertir de que no se va a cambiar ni una coma (ni una cifra) cuando cuando se presenten de nuevo las cuentas ante los dueños auténticos de la entidad y de los sentimientos que la inspiran, y que la seguirán inspirando siempre. Por hoy vale, tiempo habrá para profundizar en asuntos de mayor calado y en aportar ideas ya manejadas por mi candidatura en las pasadas elecciones, soluciones efectivas y de gestión real.

Presidente, apenas han pasado 100 días, pero aski da, basta ya de falsas insidias, de fariseísmos y hasta de curiosos abrazos presuntamente mediáticos en la recitada asamblea y, por cierto, de la enhorabuena del peor presidente de la historia del Athletic. Porque la suma de todo eso no levantará nunca a nuestro querido club. Seamos todos responsables de nuestros actos.

Gora Athletic!