ATAQUE A LA IZQUIERDA ABERTZALE
Elorrieta contrasta en Martutene la actitud de Zapatero con la de Otegi
Una delegación de ELA encabezada por su máximo dirigente, José Elorrieta, visitó ayer a Arnaldo Otegi y denunció su encarcelamiento como la evidencia de «la baja salud democrática» del Estado español. Tras censurar irónicamente esta prueba del «talante de Zapatero», el dirigente sindical resaltó la importancia que para el sindicato ha tenido el diálogo con Arnaldo Otegi, a quien definió como «una persona de gran calidad, un amigo».
Gari MUJIKA | DONOSTIA
El secretario general del sindicato abertzale ELA, José Elorrieta, censuró ayer la «baja salud democrática» del Estado español que, a su entender, demuestra el encarcelamiento de la mayoría de los representantes de la izquierda abertzale. El dirigente sindical denunció el «talante» del presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, que además de mantener la Ley española de Partidos «encarcela a toda una dirección política».
Elorrieta mostró su rechazo a las encarcelaciones de dirigentes de la izquierda abertzale en el acceso a la cárcel donostiarra de Martutene, al que acudió junto a dos dirigentes más de la central sindical para visitar a Arnaldo Otegi, preso desde el pasado 8 de junio por orden de Madrid.
La visita de la cúpula de ELA a Martutene supone el primer encuentro público que dirigentes vascos ajenos a la izquierda abertzale realizan con el dirigente independentista desde su ingreso en prisión. Fue un encuentro político, tal y como señaló Elorrieta, para dejar constancia «simbólica» del rechazo de ELA a la Ley de Partidos que, a su juicio, sustenta el impulso político que ha derivado en las encarcelaciones de los miembros independentistas.
«Perspectiva más larga»
En este sentido, Elorrieta consideró que los encarcelamientos responden a «decisiones políticas», lo que considera que supone «una referencia clave» para valorar «qué bajo está el nivel democrático en España».
Elorrieta recordó, al hilo de ello, que los representantes de Batasuna están presos como consecuencia de que «se les prohíbe el derecho de asociación, de reunión y de opinión».
A la par, insistió por dos veces en subrayar que ELA ha mantenido «muchas reuniones de trabajo con Batasuna», en las que recordó que han compartido y discrepado sobre reflexiones y análisis políticos de coyuntura. Indicó que unas pocas de ellas han tenido carácter público, pero que los encuentros han sido frecuentes y, para la central, muy importantes. Y teniendo en cuenta que era el mismo Otegi el que acudía a la mayoría de esas citas, Elorrieta sentenció que ahora se sentían «casi obligados» a ir a Martutene.
Junto a todo ello, añadió que otra de las razones por las que acudieron a Martutene fue humana, para visitar a «una persona entrañable, de gran calidad» como es, destacó, Arnaldo Otegi; «un amigo», añadió.
Trajo a colación, además, una de las ideas que lanzó Otegi en su última rueda de prensa, tras el anuncio de la suspensión del alto el fuego por parte de ETA; preguntado por las acusaciones vertidas entonces por los medios españoles contra el político de Elgoibar, Elorrieta consideró que «se debe tener una perspectiva más larga en el tiempo» y afirmó de forma tajante que «no tenemos ninguna duda de que la posición política de Arnaldo Otegi y otros dirigentes de la izquierda abertzale es en pro de un proceso de paz y de normalización política».
Agregó que ELA coincide en algunos aspectos con la izquierda abertzale, aunque también discrepa en otras muchas, pero se mostró seguro de su firme apuesta por la resolución.
Las Juntas Generales de Gipuzkoa aprobaron ayer un texto en el que condenan «enérgicamente» la detención de los dirigentes de la izquierda abertzale y exigen su «inmediata puesta en libertad». La moción fue aprobada con los votos de PNV, EA, EB y Aralar, y contó con el rechazo del PP y del PSE.
El texto aprobado fue consecuencia de una iniciativa de Aralar, a la que PNV y EA añadieron tres puntos más a la propuesta inicial. De esta manera, la moción aprobada consta de seis puntos en los que se denuncia el encarcelamiento de los representantes independentistas y se exige la derogación de la Ley española de Partidos, entre otras medidas.
En los puntos añadidos a iniciativa de PNV y EA, las JJGG aseguran que «un sistema democrático debe garantizar la posibilidad de defender cualquier planteamiento político por medios pacíficos y democráticos y de materializarlo si cuenta con el apoyo de la voluntad popular». Se comprometen, además, «a favorecer todo proceso que contribuya a liberar a la sociedad vasca de la dialéctica destructiva de presión-represión a la que está sometida, y a que este proceso se organice de forma democrática a partir de la obediencia a los acuerdos que han adoptado los vascos y a los que, en el ejercicio de su libertad, adoptarán en el futuro».
EB-Berdeak presentó otro escrito, pero lo retiró al ver que el aprobado recoge los mismos puntos.
Karmelo Landa y Haizpea Abrisketa han estado reuniéndose durante esta semana con eurodiputados y representantes políticos de la Unión Europea en Bruselas en representación de la izquierda abertzale. Según explicaron en la rueda de prensa que ofrecieron ayer, han acudido a la sede de la Comisión Europea para denunciar que con los «ataques políticos y policiales» por parte del Gobierno español contra militantes de la izquierda abertzale el PSOE evidencia que «ha tirado la llave del proceso de paz».
En este sentido, recordaron las detenciones y encarcelamientos de dirigentes de la izquierda abertzale que comenzaron en junio con la del principal interlocutor, Arnaldo Otegi, tras la que llegarían las de Juan Mari Olano, Joseba Alvarez, Oihana Agirre y más de una veintena de dirigentes el 4 de octubre en Segura y Olaberria.
Landa y Abrisketa también citaron como apuesta por la represión del Gobierno español la apertura de juicio decretada por el TSJPV por las reuniones entre el lehendakari, Juan José Ibarretxe, los dirigentes del PSE Patxi López y Rodolfo Ares, y los representantes de la izquierda abertzale Arnaldo Otegi, Juan Joxe Petrikorena, Joseba Etxeberria, Olatz Dañobeitia y Pernando Barrena.
A pesar de todas estas actuaciones, Abrisketa aseguró que la izquierda abertzale responderá con «iniciativa política» y que trabajará a favor de la creación de «un marco democrático» y «un futuro libre» para Euskal Herria.
«Vamos a seguir trabajando para la creación de un marco democrático en el que se dé la palabra al pueblo vasco y se le permita decidir su futuro como nación democráticamente», recalcó.
La representante de la izquierda abertzale añadió que «es nuestra responsabilidad política responder a la reivindicación mayoritaria de Euskal Herria, porque creemos que es nuestra labor ofrecer un futuro libre y democrático a nuestro país».
En cuanto a las detenciones realizadas en octubre contra más de una veintena de miembros de la izquierda abertzale en Segura y Olaberria, entre ellos la propia Abrisketa, consideró que «esta operación político-mediática» muestra una actitud del Gobierno español «incomprensible desde el punto de vista democrático e irresponsable desde el punto de vista político», así como su «voluntad de cerrar puertas al diálogo para una resolución democrática del conflicto y de volver al camino de la represión y confrontación».
«¿Qué proceso de paz, de negociación democrática, puede llegar a buen puerto si encarcelamos al mayor interlocutor? ¿Cómo podemos resolver un conflicto si impedimos el diálogo político», preguntó en la comparecencia llevada a cabo. Y añadió que «el Gobierno ha elegido el conflicto, la confrontación, la no-democracia, encarcelando toda posibilidad de resolverlo por el diálogo».
Abrisketa trajo a colación unas palabras de Gerry Adams, que declaró en su día que si Londres hubiera actuado de esa forma con el Sinn Feinn la situación actual en Irlanda no sería la misma actualmente. «El Gobierno español ha decretado un estado de excepción en Euskal Herria. Es la realidad y la fotografía de hoy en día», declaró.
Por su parte, Karmelo Landa consideró que las últimas acciones del Gobierno de Zapatero «significan tirar la llave del proceso de paz, el bloqueo total», lo que tildó de «inaceptable».
Además, manifestó que en la gira han trasmitido a los parlamentarios europeos que en Euskal Herria «no existen las mínimas condiciones democráticas» ya que no hay «derecho de reunión, libertad de expresión, como muestra el hecho de que dos periódicos permanecen cerrados desde hace nueve y cuatro años, una opción electoral libre ni una justicia independiente».
Landa recordó que el 25 de octubre de 2006 el Pleno del Parlamento Europeo aprobó en Estrasburgo la conocida resolución en la que «expresó su compromiso por el proceso de paz e hizo un llamamiento a los estados e instituciones de la UE para ayudar al proceso».
Por ello, reclamó la «adhesión a este compromiso» porque «el bloqueo no es aceptable», algo que ha reiterado en las reuniones en que ha participado estos días junto a Abrisketa. Como balance, agradeció todos los apoyos, pero recalcó que «lo que pedimos es un compromiso para tener una vía de solución democrática parecida a la del norte de Irlanda».