LAB sentó ayer en Iruñea a veteranos sindicalistas, protagonisats de las luchas que en los años 70 se llevaron en Potasas y de Motor Ibérica, y a jóvenes sindicalistas, pasado y presente que se dan la mano en el actual contexto socio-laboral de Nafarroa. Junto a ellos, en la rueda de prensa, participaron el portavoz de la central abertzale, Igor Arroyo, y Estitxu Urtaran.

Arroyo enmarcó la próxima cita de Atarrabia en la situación de «desmoronamiento» social y laboral al que asistimos en el herrialde, al final del «mito de que en Nafarroa todo va bien». Según Arroyo, «a nada que hagas un mínimo análisis de la realidad, empiezan a salir una serie de datos de la clase trabajadora que hacen que esa imagen idílica de la Navarra con un nivel de vida considerable, en la que hay unos servicios públicos bastante desarrollados, se desmorona».

El portavoz de LAB destaca el avance de «la precariedad, el 30% de temporalidad existente, los 18 trabajadores muertos en accidentes laborales en Nafarroa en lo que va de año... La conflictividad que se está dando en diferentes empresas -Sysmo, Solano, Onena-, con recortes de plantilla o cierres de empresas, siempre desde la perspectiva de incrementar las ganancias de los empresarios a costa de los trabajadores».

En opinión de Arroyo, no son los únicos datos preocupantes, ya que «en lo que respecta a los servicios sociales vemos que, mientras se está planteando una rebaja en el Impuesto de Sociedades, van degenerando los servicios públicos. Lo que en otros tiempos era una especie de `joya de la corona' de la foralidad, por ejemplo el servicio sanitario (Osasunbidea), en la actualidad está a la cola de Europa y del Estado español, según las estadísticas», añadió. Asimismo, destacó el problema de la vivienda y los precios de las hipotecas para miles y miles de trabajadores, «que además de trabajar para el patrón tienen que trabajar para pagar al banco, cuando debiera ser un derecho, el derecho a la vivienda».

Arroyo manifestó que la «ofensiva neoliberal que se da en toda Europa también se está dando en Nafarroa, plantea pasos atrás en los derechos laborales adquiridos, en los servicios públicos, en definitiva en los derechos en general. Frente a esa ola neoliberal planteamos la necesidad de organizarse y movilizarse, y de crear espacios comunes de respuesta. Ahí es donde entroncamos el acto del próximo sábado, un primer paso hacia ese objetivo. Recuperar un poco la memoria histórica de las luchas sindicales y políticas en Nafarroa por parte de la clase trabajadora».

En ese punto se dan la mano, apunta el sindicato, los viejos y los jóvenes sindicalistas, que en gran medida son los responsables de defender muchas de las conquistas sociales y laborales que en aquellos años lograron los veteranos luchadores, «durante el franquismo y estos 25 años de Amejoramiento».