La Unión Cristianodemócrata Alemana (CDU) aprobó ayer su nuevo programa, en un congreso sin fisuras marcado por la proclamación de su presidenta y canciller, Angela Merkel, y el principio de que sólo esa formación ocupa el centro político.

Los mil delegados, reunidos en Hannover, dieron el visto bueno casi por unanimidad al programa, el tercero de la formación, después de que Merkel expusiera las líneas de una moción destinada a tomar distancia respecto al co-gubernamental SPD. «Nosotros y sólo nosotros somos el centro. Donde nosotros estamos está el centro», dijo la canciller, para quien el SPD quedó desplazado por la ambición asumida en tiempos de Schröder.

Con ello marcó distancias respecto al SPD, lo que se considera el pistoletazo de salida electoral tanto hacia los comicios en tres länder del próximo año como en las generales de 2009.