Los emisarios de la ONU y la Unión Africana (UA) para Darfur admitieron la dificultad del proceso de negociación para superar el conflicto en esta región del oeste de Sudán, al tiempo que alertaron de «la explosiva situación que se vive en los campamentos de refugiados» de la zona.

Los dos emisarios, Jan Elia-sson y Salim Ahmed Salim examinaron con los ministros de Exteriores de Egipto, Chad, Eritrea y Libia las fórmulas para instar a los milicianos de Darfur a negociar con el Gobierno de Sudán.

«Es una labor muy difícil. La escalada militar continúa sobre el terreno en Darfur y fuera de Darfur, incluso fuera de Sudán. Ha habido enfrentamientos y existe una situación humanitaria muy muy frágil», declaró Eliasson en una conferencia de prensa con Salim.

«Me aterroriza la situación explosiva que se vive en el interior de los campos de refugiados. Hay que acabar con esa miseria», advirtió Eliasson tras la reunión que se celebró en la localidad egipcia de Sharm el-Sheij, situada a orillas del mar Rojo.

Una reunión similar tuvo lugar el pasado mes de noviembre en Asmara (Eritrea) con el objetivo de dar continuidad a los resultados logrados en Sirte (Libia). Salim afirmó que el proceso abierto en Sirte es «irreversible» y mostró su esperanza en que próximamente pueda haber resultados concretos.