Iurbentia Bilbao Basket, colíder de la Liga ACB junto al DKV Joventut, Real Madrid y AXA FC Barcelona, quiere alargar su particular fiesta mañana en el Bizkaia Arena de Barakaldo, el imponente escenario al que se trasladará a las 12.30 para recibir al MMT Estudiantes.

De cualquier manera, aunque el conjunto bilbaino atraviesa un momento tan dulce que parece ser capaz de derrotar a cualquier rival, esta celebración de fin de año tiene mucho peligro en su interior. El equipo de Magariños recién acaba de abandonar el farolillo rojo y fiarse sería lo peor que podrían hacer los de Txus Vidorreta. Los vizcainos tuvieron, sin ir más lejos, un serio aviso el pasado viernes, ya que debieron remontar ante Ricoh Manresa un horripilante primer cuarto que terminó en contra de los de Vidorreta por un sonrojante 24-5.

De esta forma, el conjunto bilbaino vela armas para dar buena cuenta de su rival y seguir en su carrera por -¡quién te ha visto y quién te ve!- conquistar la primera plaza liguera. Ya ironizaba Vidorreta tras el partido ante Pamesa, que el año 2007 debiera durar un par de meses más para Iurbentia Bilbao Basket. Si, por un casual, lograra el liderato, aunque sólo fuera por una semana, el fin de año resultaría redondo.

Disponibilidad absoluta

Una de las claves del éxito vizcaino, entre otras muchas variables, reside en ese factor de fortuna imprescindible que es la salud. Una jornada más, el técnico de Indautxu podrá contar con todos sus hombres. El único hándicap son las 24 horas más de descanso de las que ha disfrutado su rival, que ganó el jueves al Granada para abando- nar el farolillo rojo.

Bilbao Basket, un club creado en el año 2000 y que subió a la ACB en la temporada 2003-2004, ha confirmado con su segunda posición de la tabla que es el equipo revelación de la Liga ACB y, ahora mismo, también la gran preocupación de un MMT Estudiantes en lucha por la permanencia.

El MMT Estudiantes también contará con todos sus hombres en el feudo de Barakaldo. Gonzalo Martínez ha sido duda hasta última hora por un problema vírico que le ha mantenido dos días inactivo, pero el base se ha recuperado a tiempo.

En el juego interior, destaca la irrupción del ex NBA Potapenko, que ha reforzado sobremanera el poderío en la pintura de los de Perasovic. Mucho ojo, pues, con el exceso de confianza, que puede devenir en tropiezo.