Varias personas murieron en los enfrentamientos registrados en Kenia por la lentitud con la que la Comisión Electoral está publicando los resultados de los comicios presidenciales del jueves, según informó la Policía. El último recuento apunta a que el opositor Raila Odinga aventajaría al actual presidente, Mwai Kibaki, en tan sólo 38.000 votos cuando ya se habían escrutado los sufragios de 180 de las 210 circunscripciones electorales.

Miles de kenianos salieron a las calles para expresar su malestar. En las protestas se produjeron saqueos y enfrentamientos con la Policía, sobre todo, en la capital y en las zonas donde el partido de Odinga -el Movimiento Democrático Naranja (ODM)- es mayoría. Éste acusa al Gobierno, en manos del Partido de Unidad Nacional (PNU), de retrasar a propósito el recuento porque no le favorece.

En Nairobi, la Policía mató a tiros a dos personas. Asimismo, 3.000 militantes del PNU invadieron el recinto universitario de la Universidad de Ciencias para desalojar a una decena de acólitos del ODM que pretendían bloquear el recuento por considerar que se habían cometido irregularidades.

Acto seguido, mientras 5000 seguidores del PNU seguían custodiando la entrada a la universidad, otros 2.5000 marcharon hacia el barrio de Kibera, a medio kilómetro, porque les habían informado de la llegada de varios miles de oponentes del ODM. Previamente, cientos de personas salieron de este humilde barrio en dirección al centro de la ciudad para exigir que se declare ganador a Odinga. La Policía interceptó la marcha y los disolvió con gases lacrimógenos. Las fuerzas especiales, que dependen directamente del presidente de la República, se desplegaron en el centro de Nairobi, donde cortaron todos los accesos a la sede de la Comisión Electoral. En Mombasa, la principal ciudad de la costa keniana, también hubo incidentes.

Tanto Kibaki como Odinga han proclamado su victoria en estas elecciones. Dos días después de las elecciones, la Comisión Electoral informó de que Odinga, tenía la ventaja con 3,88 millones de votos frente a los 3,84 de Kibaki. No obstante, subrayó que no publicaría más resultados parciales. Ayer, el presidente de la Comisión, Samuel Kivuitu, afirmó que hoy podría conocerse el resultado final.

«Kibaki ha perdido»

El dirigente del ODM Najib Balala se mostró «extremadamente decepcionado» por todo lo ocurrido. «La Comisión Electoral no tiene ninguna excusa que justifique este retraso», incidió. «Está demostrado que Kibaki ha perdido y todo el país lo sabe, pero la Comisión no quiere reconocerlo, lo que demuestra que las elecciones han sido amañadas», afirmó.

Advirtió que «si se declara la victoria de Kibaki, las consecuencias serán desastrosas».

El jefe de la delegación de observadores de la Unión Europea, Alexander Graf Lambsdorff, pidió que se haga público el nombre del nuevo presidente lo antes posible para evitar un brote de violencia nacional.