BRUESA GBC 84

HOSPITALET 67

Como un equipo de los de toda la vida, Bruesa GBC se cimenta en el rendimiento de sus estadounidenses. Uno de ellos, Andy Panko, volvió a postularse como MVP de la semana con un partidazo de 26 puntos y 16 rebotes. Y, lo que importa de veras, su gran partido sirvió para que Bruesa GBC derrotara a Hospitalet por 84-67. Otros jugadores como Salva Arco, Isaac López Ricardo Úriz también contribuyeron con sus puntos y su intensidad en un partido sorprendente por lo irregular.

La primera gran sorpresa del encuentro fue ver al portugués Andrade de inicio, con una tarea específica de asfixiar al joven base de L'Hospitalet, Quim Colom, pero el conjunto catalán se puso a defender en zona 2-3 desde el primer instante, de modo que le costó a Bruesa GBC encontrar situaciones de tiro.

A falta de juego colectivo eficiente, sólo rota por las transiciones, el mejor Andy Panko -después de varias jornadas más grises- emergió para romper el choque dando todo un clínic de cómo un alero debe cargar el rebote ofensivo. Sólo en el primer cuarto el alero estadounidense llevaba 14 puntos y ocho rebotes.

Un equipo tan joven como el de Hospitalet tiende a la irregularidad. El equipo catalán tuvo ayer unas dificultades tremendas de anotar, de modo que Bruesa GBC se aprovechó de ello gustosamente. Bajo la batuta de Matías Nocedal -Perico Sala parece defenestrado-, el conjunto donostiarra dobló en el marcador a los visitantes: 29-14.

Pero con Hopkins y Panko en el banquillo, Hospitalet comenzó a controlar el rebote y entre el poderío de Ibaka y Antelo bajo los aros y la anotación de Taylor, el marcador pasó a 32-25.

Doblas y Faverani, sobre todo el brasileño, jugaban casi amodorrados, fuera de sitio, y se echaba de menos a la pareja estadounidense de Bruesa GBC. Pablo Laso, lógicamente enfadado, paró el juego con un tiempo muerto.

Y el tiempo surtió efecto. Entre un Salva Arco muy activo -ofreció incluso un mate precioso yéndose por la línea de fondo-, un Oliver Arteaga sólido como nadie en la pintura y la anotación de Andy Panko, el conjunto local se fue al descanso con una cómoda ventaja de 11 puntos: 43-32.

Irregularidad a raudales

Pablo Laso había destacado durante la semana que su equipo sufre de lagunas de concentración. Y tiene razón.

La reanudación del juego -retrasada por un pequeño problema en la red de una de las canastas- fue un desastre para Bruesa GBC, ya que se dejó remontar por un Hospitalet en el que Johnson tuvo unos minutos extraordinarios. La mejor noticia para los donostiarras era que los pivots catalanes, Llorens e Ibaka, se retiraban lesionados.

Bruesa GBC no terminaba de encontrarse -sorprende ver a alguien tan solvente como Bernard Hopkins prácticamente inédito- y al final del tercer cuarto Hospitalet se acercaba a ocho puntos: 59-51. Pero el equipo local mantuvo ese colchón y Hospitalet tampoco dio la impresión de poder remontar.

Así las cosas, con el inicio del último cuarto, el cuadro donostiarra pudo, por fin, decidir el choque. La defensa donostiarra carburaba y la ventaja aumentaba mediante contraataques fulgurantes. Dos triples seguidos de Isaac López pusieron el marcador en un 77-53 definitivo.