Después de tres años en los que le ha tocado pasar de todo, Roberto Bonano llegó ayer a un acuerdo con los directivos del Deportivo Alavés para rescindir su contrato, que termina en junio. La ausencia en las oficinas del administrador concursal impidió la firma del acuerdo, pero el portero de 38 años colgará las botas tras una dilatada carrera en Rosario Central, River Plate, Barcelona, Murcia y Alavés.

Apartado del equipo en tiempos de Piterman por salir en defensa de Carreras, el portero argentino no entraba en los planes de Uribe para esta temporada, por lo que se quedó sin ficha, pero seguía acudiendo todos los días a Ibaia, agarrándose al contrato firmado años atrás. Tras semanas de negociaciones, las dos partes han llegado a un acuerdo y Bonano se despedirá hoy de sus compañeros para irse a vivir a Barcelona, donde reside su familia.

En el plano deportivo, el equipo de Josu Uribe, que pasa por su situación más tranquila de los últimos tres años y medio, trabajó ayer con el que será el presumible once inicial de mañana en Anoeta.

Con la posibilidad de recuperar a los cuatro jugadores que no pudieron jugar ante el Racing de Ferrol al encontrarse sancionados, la principal duda para el derbi es quién acompañará a Pablo Casar en el eje de la defensa, Mateo o Gaspar.

Con todos los hombres del centro del campo a su disposición, Uribe pondrá a Lacen de ancla, con Astudillo y Sergio por delante, Toni Moral y Gabri en bandas y Aganzo como punta.