Haciendo honor al lema elegido -Euskal Herria, gure indarra-, la coalición Euskal Herria Bai (EH Bai) abordó con fuerza las elecciones que se celebrarán los próximos 9 y 16 de marzo para elegir a los consejeros generales que representarán los once cantones vascos que se renuevan en estos comicios en la asamblea de Pau.

El acto de presentación de candidatos tuvo lugar ayer en la sala Plaza Xoko de Baigorri y a él acudieron un centenar de militantes y simpatizantes de los tres partidos -AB, Batasuna y EA- que componen la coalición. Entre la asistencia podía verse, asimismo, a los mahaikides Karmele Aierbe y Eusebio Lasa.

Tras un par de bertsos de bienvenida, la representante de AB Mertxe Colina tomó la palabra para recordar que, «animados por los resultados obtenidos por la coalición en las pasadas elecciones legislativas y ante el éxito y la satisfacción mostrados por el electorado abertzale», las tres fuerzas políticas decidieron volver a repetir la experiencia y presentarse juntas en las elecciones cantonales.

Colina incidió en que «a pesar del desprecio y las agresiones que viene sufriendo Euskal Herria estos últimos años, la lucha popular ha permitido avances importantes». Afirmó que el movimiento abertzale ha sido «un vector dinámico en todas esas luchas» y que están «dispuestos a seguir el camino trazado por generaciones anteriores de abertzales y trabajar en favor de los derechos de Euskal Herria». Para ello, abogó por reforzar y consolidar EH Bai «porque constituye el voto alternativo útil».

Nexo de unión

Tomando el relevo de la portavoz de AB, Jean-Claude Agerre inició su intervención subrayando que «el principal nexo de unión de las tres fuerzas es la defensa de Euskal Herria, también en las elecciones».

Para el mahaikide de Batasuna, resulta «indispensable que la especificidad vasca esté presente» en las mismas. Insistió en que para preservar dicha especificidad, es necesario un marco jurídico con competencias amplias para Lapurdi, Nafarroa Beherea y Zuberoa «como primer paso para ser dueños de nuestro futuro» y para poder responder a las necesidades económicas, sociales, culturales o lingüísticas.

Reconoció que en la carrera a la institución departamental estas cuestiones ni se plantean, porque «Euskal Herria prácticamente no existe» y que el debate se circunscribe, tanto en los partidos de derecha como en los de izquierda, a «quién será el próximo presidente».

Agerre aseguró que EH Bai «no entrará en ese juego» pero mostró la determinación de la coalición para hacer frente a la «estrategia de exclusión de Euskal Herria que practica el Consejo General», reivindicando su existencia y reclamando los instrumentos que garanticen el desarrollo de los tres territorios en todos los ámbitos.

El mahaikide denunció el «clientelismo y electoralismo» de la mayoría de los presentes en la asamblea departamental y evocó como ejemplo ilustrativo de ello, lo ocurrido en torno a la autovía transpirenaica o la votación del último presupuesto en el que casi ni se han presentado enmiendas en pro de Ipar Euskal Herria para, según Agerre, «no aparecer como aguafiestas y poder presentarse con tranquilidad» en los próximos comicios.

Mattin Etxepare de EA, también hizo mención al «habitual clientelismo» reinante entre la clase política que ocupa los escaños del Consejo. En su breve pero contundente intervención expuso la voluntad de EH Bai de hacer frente a los problemas de «los jóvenes y menos jóvenes», al deseo de ser un «país reconocido con una institución propia», a la necesidad de «perennizar las relaciones con el resto de territorios vascos», a la de «defender y extender el euskara», a la de «compartir la riqueza».

El presidente de EA-Iparralde, remarcó que, para todo ello, «EH Bai es la única fuerza alternativa útil».

La última intervención antes de pasar a la presentación de los candidatos, corrió a cargo de Jean-Michel Galant. Para el actual consejero general por el cantón de Baigorri, el acto de ayer fue «un acontecimiento importante porque los abertzales nos presentamos unidos con un mensaje claro: nuestra fuerza, Euskal Herria», mensaje que prometió extender con entusiasmo en su cantón.

El único electo abertzale presente en el Consejo General no negó haberse sentido «un tanto solo» entre los 52 consejeros que lo componen. Manifestó que «no siempre ha sido fácil» ya que ha tenido que obrar entre políticos, «la mayoría de ellos profesionales». Sin embargo, reconoció que con el tiempo ha llegado a acostumbrarse y que, incluso, le ha «tomado gusto» por lo que ha decidido volver a presentarse.

Tres «ejemplos»

Galant quiso mostrar «tres ejemplos que evidencian que Euskal Herria no tiene sitio en el Consejo General». Evocó un costoso y vasto informe realizado por la institución hace 4 años sobre las zonas de desarrollo en el que «sorpresivamente» se encontraron con que no son dos territorios -Ipar Euskal Herria y Bearn- los que componen el Departamento sino cuatro. Una repartición que para el consejero evidencia la intencionalidad de diluir la especificidad de cada territorio, en especial el vasco.

El segundo ejemplo de la voluntad de eludir cualquier reconocimiento del mismo expuesto por Galant fue el proyecto de autovía transpirenaica ya que el Consejo de Pau desvió la reivindicación de mejora de las comunicaciones viales entre la costa y el interior, para intentar «imponer» el eje Iruñea-Salies de Béarn con la autovía 2x2.

El último ejemplo que refirió el consejero abertzale fue el de la desaparición de las dos estructuras oficiales -una de Ipar Euskal Herria y otra del Bearn- encargadas del turismo para unificarlas en una a nivel departamental. «El slogan elegido es revelador» añadió Galant: «Ici les Pyrénées sont Atlantiques (Aquí los Pirineos son Atlánticos)». Ante este estado de cosas, incidió en la necesidad de «que haya electos abertzales» en el Consejo y mostró la determinación de EH Bai para que «desde Hendaia a Maule Euskal Herria sea nuestra fuerza».