Liga ACB
Baskonia se reivindica en Valencia de la mano de Rakocevic
Cinco puntos seguidos del escolta dirimieron el «derbi azulejero» en un gran partido que tuvo mil y una alternativas y en el que también destacó el pívot croata Stanko Barac, cedido por el Tau
PAMESA VALENCIA 74
TAU BASKONIA 76
Arnaitz GORRITI | GASTEIZ
A menos de un minuto Tau Baskonia perdía 74-71 y Spahija quitaba a Prigioni para sorpresa general. A falta de líderes «naturales», salió Rakocevic como líder real. Primero clavó un triple desde casi ocho metros y después dos tiros libres para darle la victoria en el «derbi azulejero» al Tau Baskonia. El cuadro baskonista se reivindicó con esta victoria en un choque de mil alternativas, reforzando la confianza del escolta serbio en su clutch time.
Tau Baskonia, que salió con McDonald de titular, arrancó avasallando. Rakocevic anotó siete puntos en un parcial de 2-11 que obligó a Katsikaris a pedir tiempo muerto. La defensa gasteiztarra sorprendía por su dureza y -Rubén Douglas sufrió ante Vidal- y por su variedad, ya que Spahija ordenó una zona de ajustes después de tiros libres, de modo que el conjunto valenciano no encontraba buenas situaciones de tiro.
Stanko Barac mon amour
Sin embargo, a pesar del 4-15 a su favor, los de Neven Spahija no pudieron romper el encuentro, después de errar cinco tiros libres de forma consecutiva.
Ayer se volvió a confirmar que el peor enemigo está en casa. Stanko Barac, cedido por el club baskonista, revolucionó el choque. Con sus interminables 217 centímetros y sus fundamentos borró del partido a McDonald y a Splitter. Falló el tiro decisivo, ¡pero qué bueno es!
Tras el 17-19 del primer cuarto, el «derbi azulejero» tomó color naranja. Entre Barac, Claver, Oliver y el navarro Urtasun, Pamesa se adelantaba 30-24.
Los jóvenes valencianos volvieron al banquillo y Tau Baskonia al partido. En un minuto los gasteiztarras empataban a 30. Al descanso, tras una técnica a Katsikaris, los de Spahija se fueron con ventaja: 37-40.
La anotación bajó sensiblemente tras el regreso de los vestuarios. No obstante, un tapón de Planinic y otro de Claver en los cielos, un robo de Vidal, un «tres más uno» de House... no faltaron acciones mágicas, que dejaron el marcador 52-50 al inicio del último período.
No había manera de que un equipo descolgara al otro, aunque Pamesa llevaba la iniciativa en el luminoso. Un triple de Prigioni ponía el marcador 63-64 y Katsikaris paraba el juego con un tiempo muerto.
Muoneke puso a los de Spahija dos puntos arriba y el físico gasteiztarra parecía más fresco que el local. El marcador reflejaba 69-71 a falta de dos minutos, pero entre Douglas y Williams el marcador entraba 74-71 en el último minuto. El choque corría peligro, pero ahí apareció Rakocevic para remontar.
La victoria en un partidazo como el de ayer bien podría valer por unos saltos y brincos de alegría, pero Neven Spahija se supo mantener en su sitio para analizar el encuentro. Tanto el técnico baskonista como Fotis Katsikaris destacaron la tremenda calidad del encuentro y que el mismo se decidió por «detalles».
Por parte de Spahija, el croata destacó la «energía» de su equipo ante el cuadro valenciano, diferenciando muy mucho la frescura física de sus pupilos en la jornada de ayer y el abotargamiento general frente al Montepaschi Siena en Euroliga.
«Como en otros choque de la Liga ACB, este partido ha tenido un nivel muy alto, que se ha decidido por detalles. Hemos podido jugar con mucha mayor energía que contra Siena, ya que tuvimos que jugar sin poder entrenarnos prácticamente, de modo que no se puede comparar nuestro juego de entre la semana».
Por último, el técnico de Sibenik no quiso darle vueltas a la posibilidad de ser cabeza de serie debido a los posibles tropiezos de sus rivales. «Sólo puedo pensar en mi equipo», dijo.
A. G.
