Un millar de personas reclama en Arbizu el derecho a vivir en libertad
Un millar de personas se manifestaron ayer por la tarde en Arbizu para reclamar el derecho a vivir libres. La convocatoria de este acto surgió a raíz de la carga de la Policía Foral el pasado 1 de enero, que detuvo a dos personas y causó heridas a otros 15 vecinos del pueblo.
Iñaki VIGOR |
Entre gritos de «Errepresiorik ez», la manifestación comenzó a las siete de la tarde en la Plaza del Ayuntamiento y finalizó una hora más tarde en el mismo lugar, tras recorrer la mayor parte de las calles del pueblo.
La marcha estuvo encabezada por una pancarta con el lema «Arbizuk aske bizitzeko eskubidea. Inposaketarik ez», portada por los concejales (todos ellos de ANV), y no se produjeron incidentes a pesar de que la Guardia Civil se colocó al paso de los manifestantes y estuvo patrullando el pueblo durante el acto.
La presencia de la Guardia Civil fue respondida con gritos de «Alde hemendik, utzi pakean», «Zuek faxistak zarete terroristak» y «A ellos la Ley Antiterrorista». Pero las consignas más coreadas fueron las de «Errepresioa ez da bidea» y «Foralak ere txakurrak zarete».
Con los gritos contra la Policía Foral los manifestantes quisieron denunciar la actuación de agentes de este cuerpo el 1 de enero, cuando dos furgonetas irrumpieron en Arbizu por la mañana, cuando los vecinos celebraban el año nuevo, y dieron lugar a altercados que se saldaron con dos personas detenidas y quince contusionados por las cargas policiales. Uno de los detenidos y heridos fue el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Arbizu, Mikel Josu Gartziandia, quien recriminó a los agentes su actuación. Otro joven fue detenido días más tarde.
«Respuesta contundente»
El propio Gartziandia portó ayer la pancarta de la manifestación, pero lo hizo con una sola mano. La otra la tiene escayolada a consecuencia de los golpes que recibió por parte de los agentes de la Policía Foral.
Al término de la manifestación el alcalde, Jesús Mari Mendinueta, leyó un comunicado en el que denunció la actitud de la Policía Foral. «Queremos decir bien claro que si la Policía Foral continúa por este camino -afirmó- recibirá el desprecio y marginación de los vecinos, y que responderemos a los ataques del mismo modo que hemos hecho hasta ahora».
El alcalde también agradeció la «multitudinaria» presencia vecinal en la manifestación convocada por el Ayuntamiento: «Con esta respuesta tan contundente les queremos decir a los cuerpos policiales que no es bueno el camino que llevan».
Mikel Josu Gartziandia (ANV) recordaba ayer lo ocurrido el pasado 1 de enero: «Los agentes vinieron a provocar. Fui a pedirles explicaciones, a ver qué hacían allí, y a decirles que había gente en el bar y que se podía armar algún follón. Nada más salir del bar empezaron a pedir la identificación, yo les dije que era el teniente de alcalde, pero no me hicieron caso y me detuvieron. En el momento de la detención me sacaron el brazo y me golpearon». Las consecuencias de aquella agresión todavía eran evidentes ayer. Este concejal llevaba el brazo «en cabestrillo» y los médicos le han dicho que tardará entre tres y cuatro semanas en recuperarse. Gartziandia también ha presentado denuncia ante el juez contra los agentes que le golpearon, junto con el informe del médico forense que le reconoció. Ahora se encuentra a la espera del juicio, que previsiblemente se celebrará dentro de entre uno y dos años.
El Ayuntamiento de Arbizu decidió hacer una recogida de firmas para avalar el acuerdo plenario adoptado un día después de aquellos hechos, en el que denunciaba la actuación «provocadora» de la Policía Foral y su versión de los hechos. De momento, más de 200 vecinos del pueblo han dado su firma a dicho acuerdo municipal.
La Guardia Civil, que apareció nada más iniciarse la manifestación y patrulló el pueblo durante la marcha, fue recibida con gritos de «Alde hemendik, utzi pakean» y «A ellos la Ley Antiterrorista».
