Un secretario judicial acudió ayer a la mañana al gaztetxe de Olabeaga, en Bilbo, para hacer entrega de la orden de desalojo del local autogestionado por los jóvenes desde hace más de tres años. Al verificar que estaba ocupado, les informó del cercano desahucio, que desde la Gazte Asanblada estiman será esta semana, una vez que han constatado un ostensible incremento de la presencia policial en el barrio en las últimas jornadas.

Poco después de tener en sus manos la orden de desalojo, a las 10.30, cerca de 200 personas se concentraron contra la decisión adoptada por el Consistorio bilbaino. Esta movilización se suma a la que protagonizaron el sábado a la tarde varios centenares de jóvenes por las calles céntricas de la villa. Desde la Gazte Asanblada de Olabeaga se anuncia que resistirán y que se movilizarán en defensa del gaztetxe.

El Consejo de la Juventud de Euskadi mostró ayer su apoyo a este proyecto en peligro «y al resto de los gaztetxes». Además, trasladaron al conjunto de las administraciones públicas, «y de manera especial al Ayuntamiento de Bilbao, la necesidad de afrontar la realidad de los gaztetxes desde otros parámetros, valorando tanto el trabajo que se hace en los barrios como el esfuerzo de organización juvenil que suponen».

El Consejo recuerda su apuesta por una sociedad «más justa, más abierta y plural, por el fortalecimiento de la sociedad civil, por alternativas transformadoras, por el desarrollo local, por la participación y la ciudadanía plena de las personas jóvenes, por la vocación de cambio y acción social, por la democracia participativa. Por todo esto, creemos que los gaztetxes son necesarios».

La organización juvenil en la que se representan asociaciones y organismos de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa estima que los gaztetxes «se erigen como focos generadores de participación y organización juvenil; apostando por ser autónomos en sus decisiones y su propio funcionamiento, no dependientes de horarios ni de subvenciones».

Es más, considera que los locales autogestionados por los jóvenes son «modelos válidos para el fomento de la participación y organización de un elevado número de jóvenes».

Por ello, desde el Consejo de la Juventud de Euskadi entienden que los gaztetxes y lo que se mueve a su alrededor constituyen «espacios a respaldar y como un modelo válido de participación juvenil». Éste es el motivo del respaldo del organismo al gaztetxe de Olabeaga.

Insiste en ello, una vez que desde el marco institucional -resaltan desde el Consejo de la Juventud- «muchas veces se han potenciado lugares co-mo los centros cívicos donde existen problemas para que la población de 15 a 30 años se integre en este modelo de articulación social».