Después de firmar un contrato por cuatro años con la empresa de telefonía móvil Sony Ericsson y convertirse en el icono mundial de esta marca, Sharapova ha comentado que entre sus anhelos esta temporada figura participar en los JJ.OO. de Beijing, recuperar la corona de Wimbledon que ganó en 2004 y seguir contribuyendo con su fama e imagen a recabar fondos para los afectados por el desastre de Chernobil de 1986.

¿Cuáles son sus aficiones aparte del tenis?

Entrar en una pista de tenis es como escapar del mundo exterior y eso me encanta hacerlo. Pero una vez fuera, me gustan otras cosas, como estar pendiente de mi página web y del mundo de la moda y del diseño.

¿Cómo se las arregla para intentar pasar inadvetida cuando es noticia allí donde va?

Teniendo un gran equipo, principalmente mis padres y mis amigos, que siempre me han protegido desde que era una niña y que me arropan, me aconsejan y no me abandonan. Están siempre ahí de una forma en la que nunca me siento sola.

Si usted no hubiera sido tenista, ¿qué le habría gustado ser?

Me gustaría haber tenido algo que ver con el diseño, con la moda, incluso tener mi propia línea de ropa.

En la final del año pasado del Abierto de Australia perdió contra Serena Williams en dos sets muy fáciles. ¿Qué aprendió de aquella derrota y por qué llega tan lejos en este Grand Slam?

Siempre aprendo algo de cada partido que juego, y sobre todo de los que pierdo. Tuve mucha suerte de no perder en primera ronda el año pasado, porque estuve a un solo partido de irme del torneo y luego alcancé la final y fue una buena forma de empezar el año. Respecto a mis últimos resultados en Melbourne, quizás lo arreglan para mí (risas). Todos quieren comenzar la temporada genial. Es el primer gran desafío del año y significa saber en qué punto se encuentra uno.

¿Ha probado ya la nueva pista del Abierto de Australia?, ¿qué le parece?

Me gusta, me gusta su color pero lo importante es que sea mejor para nuestros cuerpos, en cuanto a las lesiones. La velocidad es buena, pero al fin y al cabo es la misma superficie para todos y al final todos tenemos que luchar en las mismas condiciones.

Es la quinta jugadora del mundo, pero una de las deportistas más ricas del planeta, ¿cómo es posible?

Es porque trabajo muy duro todos los días como una profesional totalmente dedicada a ello, y también sé disfrutar de la vida, y desde luego también hacer buenos negocios.

Este año es muy importante con los Juegos Olímpicos de Beijing a la vista. ¿Va a jugar allí?

Si, jugaré. Estoy muy ilusionada en formar parte de esa gran experiencia porque es un año especial. El circuito lo forman torneos cada semana pero allí todo será diferente.

¿Cuáles son sus principales objetivos para el 2008, como deportista y también al margen de las pistas de tenis?

Desde luego Wimbledon forma parte de mis objetivos este año pero también quiero trabajar por todos aquellos que todavía siguen afectados por el desastre de Chernobil y permanecen en hospitales.