Iñaki Lekuona Periodista
Ya estamos de elecciones
Pues sí. Ya estamos de elecciones. El presidente español, el campeón del diálogo, afirma con rotundidad espeluznante que nunca jamás de los jamases se sentará con ETA. Y al mismo tiempo, su brazo derecho, De la Vega, anuncia que ANV está «más cerca de la ilegalización, y eso puede ocurrir en cualquier momento». El PSOE piensa que le salen las cuentas, un par de declaraciones categóricas por aquí, otro par de afirmaciones tajantes por allá, y a pasar por caja en marzo.
Qué triste es la política española. Y la francesa. Como se anunció, sube la gasolina, pero con el follón de la novia del presidente la cosa se queda en nada, una anécdota en los informativos de la noche. Triste también es la política europea, porque para rizar rizos, Tony Blair se nos presenta en París abrazando al oso ultraliberal Sarkozy. Y es que el converso británico se postula como presidente del Consejo Permanente o como quiera que se vaya a llamar el órgano de dirección previsto por el Tratado de Lisboa. Y es que en política los aliados son de lo más extraños y las amistades sospechosas. «Es un grande de Europa», le aduló el francés, a lo cual, el antiguo inquilino de Downing Street le respondió: «Yo, en los Estados Unidos sería demócrata. En el Reino Unido, laborista. En Francia... estaría probablemente en el gobierno». Una afirmación con sonrisa que se apresuró a precisar, «que no, que es broma, yo estaría en el partido socialista, pero al lado de aquellos que tuvieran corazón para transformarlo».
Estamos de elecciones, y en estas celebraciones todos los matrimonios están permitidos. Si no que se lo pregunten a los Verdes en Baiona, que, según publica hoy «Le Journal», anuncian mañana que en las municipales de marzo irán de la mano del ultraconservador alcalde Jean Grenet, aquel que dijo aquello de que las chicas van por ahí provocando con esas ropas tan ceñidas, y claro, luego pasa lo que pasa, que cuatro borrachos van y las violan. En fin. No sé qué razones aducirán los ecologistas para argumentar su alianza contra-natura, pero lo único cierto es que es muy triste la política. Aquí y en Kirguizistán. En marzo toda Euskal Herria estará en elecciones. Vaya panorama.