De la central de Castejón a los molinos de Valdorba, claroscuros del modelo energético
La decisión judicial de advertir sobre la ilegalidad de la ampliación de una central térmica en Castejón -cuando la millonaria inversión está ya realizada- ha vuelto a situar la atención en proyectos energéticos que ampara el Gobierno de Nafarroa. GARA se detiene hoy en las iniciativas para poner en marcha un «parque experimental», o lo que es lo mismo, más molinos y de aspas más poderosas en el valle de Valdorba. Lo cierto es que además de generar grandes beneficios a las eléctricas reconvertidas a la «energía verde», los parques eólicos que pueblan este paso entre el Pirineo y Erribera han tenido impactos no apetecidos por los vecinos de una zona de gran riqueza natural, pero en situación de declive económico. El desarrollo de estos parques ha traído mejoras en forma de servicios a los pueblos afectados, pero no cabe obviar que poner más molinos implica abrir más pistas, lo que supone amplificar un impacto en un entorno natural en el que las aspas han causado ya trastornos paisajísticos y de fauna considerables. Cantar las bondades de las energías renovables sin cuestionar los modelos de consumo energético es hurtar datos fundamentales al debate.