El Gobierno esperará a que Garzón abra la ofensiva contra EHAK y ANV
El Gobierno español deja en manos del juez Baltasar Garzón la llave del inicio de la ofensiva contra ANV y EHAK. Se había especulado con que el Consejo de Ministros aprobaría ayer autorizar a la Abogacía del Estado a presentar las demandas de ilegalización, pero Fernández de la Vega confirmó que esperarán a Garzón. El procedimiento copia, por tanto, el de agosto de 2002, cuando antes que nada se suspendió la actividad de Batasuna y se cerraron sus sedes.
GARA |
El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón llevará la batuta en la ofensiva contra EHAK y ANV que se anuncia como inminente desde hace semanas. Así lo confirmó ayer la vicepresidenta del Gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega, tras el Consejo de Ministros, en el que no se tomó la decisión de autorizar la presentación de las demandas de ilegalización, como habían especulado algunos medios de difusión.
Preguntada sobre si la falta de noticias suponía que el Ejecutivo renunciaba por ahora a impulsar el veto a los dos partidos abertzales, De la Vega dejó claro que no, sino que el liderazgo lo llevará la Audiencia Nacional.
Esto convierte en más impredecible la forma que tomará la ofensiva. En agosto de 2002 fue también Baltasar Garzón quien lanzó el ataque contra Batasuna. El mismo 26 de agosto en que el Congreso daba luz verde al proceso de ilegalización de la formación independentista e iniciaba así el trámite ante el Tri- bunal Supremo, Garzón decretó en un auto la suspensión de las actividades de Batasuna durante tres años. La medida incluía el cierre de sus sedes, que fue ejecutado de modo inmediato por la Ertzaintza, la Policía y la Guardia Civil.
Fue unos días después cuando el Ejecutivo, entonces en manos del PP, acudió al Supremo con las denominadas «mil pruebas» para sacar del marco legal español a Batasuna. La sentencia del Alto Tribunal español no llegaría hasta seis meses más tarde.
¿Ilegalizar antes del 9-M?
La presión y las filtraciones mediáticas están poniendo en un brete tanto al juez Garzón -que ya mostró su incomodidad por los intentos de acelerar la operación- como a De la Vega, según quedó en evidencia en la comparecencia de ayer.
Preguntada con insistencia por el motivo por el que no se había tomado acuerdo alguno sobre la ilegalización, dijo que «como saben, el Gobierno está pendiente de que los informes solicitados en un procedimiento que se sigue en la Audiencia Nacional sean facilitados e incorporados a la causa, que en este momento se encuentra bajo secreto de sumario».
«En el mismo momento en que esos informes sean entregados y el juez adopte las decisiones que en su caso considere oportunas y podamos conocerlas, el Gobierno actuará de inmediato», prometió.
De la Vega matizó que, al margen de la suspensión de actividades por parte de Garzón, el Gobierno no descarta que el procedimiento de ilegalización posterior pudiera tener efectos antes de las elecciones del 9 de marzo. Al contrario de lo que ocurrió en 2002, este procedimiento se tramitaría como «incidente de ejecución de sentencia», lo que según el Ejecutivo acortaría mucho los plazos.
La número dos del Gobierno de Zapatero insistió en tranquilizar a quienes se alteran por la posibilidad de que ANV llegue hasta las urnas. Recordó, al respecto, que siempre cabría la opción impugnar sus listas.
Nekane Erauskin, portavoz de Ezker Abertzalea en el Parlamento de Gasteiz, ve claro el motivo de la amenaza contra EHAK y ANV: «El PSOE y el PNV están intentando hacer una reforma estatutaria y los partidos independentistas les molestamos», manifestó en una entrevista concedida a Herri Irratia.
Vistas las numerosas filtraciones, la representante de EHAK destacó que aunque no tienen datos «parece ser que el Gobierno español ya ha tomado alguna decisión, una decisión política». Opinó que ahora «la tienen que justificar, y para eso ponen los medios tanto periodísticos como jurídicos y policiales». «Parece ser que tienen un calendario estipulado y van tomando las medidas según los intereses particulares de su partido político y del Gobierno español», recalcó Erauskin.
En una rueda de prensa en Iruñea, otro miembro de la izquierda abertzale, Patxi Urrutia, estimó igualmente que lo que esta ocurriendo durante estos días es que «se están inventando razones para `vestir el santo'».
En cualquier caso, alertó a los ilegalizadores de que «se empeñan en una obra imposible, porque las ideas de la izquierda abertzale están muy ancladas en la sociedad y tarde o temprano son ideas que van a salir adelante».
Preguntada en Herri Irratia por si la izquierda abertzale estará en las elecciones estatales, Erauskin se mostró convencida de que sí, aunque la fórmula no se pueda conocer ahora. Y aventuró que si se producen nuevas ilegalizaciones, «este pueblo no se va a quedar sentado».