Invitado por el sindicato CIG, el secretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, participó ayer en dos actos organizados por la central gallega en Santiago de Compostela. Díez, que disertó sobre la situación política de Euskal Herria, apuntó a que el cambio político es inevitable, y que, a día de hoy, «el pulso político se sitúa en los contenidos de ese cambio». Agregó, además, que «eso es lo que desatará el nudo del conflicto permitiendo reconstruir un proceso de diálogo, negociación y acuerdos».

En una reunión en la que se congregaron los principales cuadros políticos del sindicato gallego, Rafa Díez definió la actual situación como un periodo de «tránsito entre dos ciclos políticos»; el «terminado» -afirmó que «el ciclo constitucional-estatutario vigente ha tocado techo y sigue sin resolver la cuestión nacional interna»- y el «nuevo», del que apuntó «que no termina de definirse» y cuya búsqueda marca el momento político actual.

Reforma o segunda transición

Ante esta inevitable encrucijada, el secretario general del sindicato abertzale entiende que encima de la mesa hay dos direcciones diferentes a escoger: «Modificar los estatutos de autonomía en el marco de la misma jaula constitucional que consagra una única soberanía» o poner en marcha «una segunda transición en el modelo territorial desde el reconocimiento plurinacional del Estado y el respeto a la volun- tad de las naciones vasca, gallega y catalana».

Respecto al fallido proceso negociador, Rafa Díez Usabiaga apunta a la responsabilidad del PSOE. Consideró, entre otras cosas, que el partido de Rodríguez Zapatero «entró en el proceso sin los avales del Estado y sin una dirección definida».