Las calles céntricas de Iruñea y Gasteiz fueron ocupadas ayer por escolares de todas las edades, estudiantes de institutos y universidades. Lo hicieron junto con profesionales de la educación, y con los padres y madres que exigían una escuela euskaldun para sus hijos e hijas, con el fin de garantizar que éstos acaben la etapa educativa con el euskara interiorizado.

Euskal Herriak Bere Eskola, que había convocado las manifestaciones, quiso llevar a la calle la reivindicación de un sistema educativo propio, y denunció una vez más que «el actual sistema de modelos lingüísticos ha fracasado». Prueba de ello, citó los estudios sobre el dominio de la lengua entre los estudiantes de Euskal Herria, realizado por Aztiker: «Hoy en día, de tres alumnos sólo se euskalduniza uno», y también los realizados por PISA, que mide los sistemas educativos: «Entre los alumnos de Gipuzkoa, Bizkaia y Araba, sólo el 16% ha realizado el exámen en euskara». Por ello, exclamaron «Aski da!», indicando que «ya es hora de realizar propuestas serias».

Movilización social

En ese sentido, señalaron que la presión social «se les hecha encima a los responsables: 107.768 firmas, concentraciones, manifestaciones, actuaciones espectaculares, congresos, propuestas... hoy podemos decir que las políticas en torno al idioma van a cambiar», pero según añadieron, «cabe cuestionarse si de verdad servirán para garantizar la euskaldunización».

Esa desconfianza viene justificada por «el plan que tiene en marcha Euskararen Erakunde Publikoa, que hasta el 2020 cierra las puertas a la oficilialidad, o el impulso al modelo castellano-inglés que promueve el Instituto del Euskara en Nafarroa», según explicaron.

Señalaron la intención de algunos partidos de evitar la recuperación del euskara, pero frente a ello, se mostraron con fuerza anunciando que intensificarán su reivindicación: Están recogiendo postales en centros escolares con el objetivo de entregarlas en las oficinas de los responsables institucionales.