Diez personas murieron y más de un centenar resultaron heridas en un atentado kamikaze registrado ayer en la estación de Colombo, la capital de Sri Lanka, según fuentes oficiales del Gobierno.

Un portavoz de la Policía cingalesa afirmó que el atentado era obra de un kamikaze de los Tigres de Liberación de Tamil Eelam (LTTE), la guerrilla que reclama la independencia del norte y el este de esta isla del Índico. Según esta fuente, el kamikaze hizo explotar la carga que llevaba encima a la llegada de un tren proveniente de Ambepussa, en el extrarradio de Colombo.

«El ataque lleva la marca de los Tigres», dijo un policía en la misma estación. «Hemos encontrado la cabeza del kamikaze en uno de los andenes», añadió.

La estación de Colombo está situada en el centro de la capital de Sri Lanka, muy cerca de las oficinas de la Presidencia.

Unas horas antes, al menos seis personas resultaron heridas por una granada lanzada en un zoo cercano a Colombo. Asimismo, el sábado un atentado contra un autobús en el centro de la isla provocó 20 heridos y unos 60 heridos.

La seguridad se ha reforzado en Sri Lanka, puesto que hoy se festeja el 60 aniversario de su independencia de Gran Bretaña.

Los enfrentamientos armados están en aumento después de que Colombo y el LTTE rompieran definitivamente el 16 de enero el frágil alto el fuego que firmaron en febrero de 2002, bajo los auspicios de Noruega.