Una victoria y dos derrotas. Es el saldo que dejó para los equipos vascos la decimotercera jornada de Liga. La noticia positiva se produjo en Donostia, donde Spyro Bera Bera sumó un suculento triunfo (33-21). Por dos motivos adicionales: llegó acompañado del bonus ofensivo y se produjo ante el Alcobendas, rival directo en la lucha por evitar el descenso.

Algo similar le sucedió al Ampo Ordizia. Sólo que, en este caso, los guipuzcoanos interpretaron el papel de visitante derrotado en casa de un aspirante a la permanencia, 31-24 ante la Santboiana. Al menos se rascó un bonus defensivo.

Bera Bera arrancó a tope de revoluciones y supo aprovechar además el viento favorable. La superioridad de su delantera y la velocidad de los tres cuartos llevó al marcador un abrumador 21-3.

La segunda parte comenzó por los mismos derroteros, pero Alcobendas empezó a reaccionar y los donostiarras vivieron momentos de incertidumbre al ver cómo su rival llegaba a colocarse a sólo cinco tantos por detrás. Afortunadamente llegó un ensayo salvador que amarraba la victoria.

En Sant Boi, el equipo del Goierri comenzó por delante merced a un drop de Catchopole. Fue un espejismo, porque los catalanes empezaron a sumar hasta plantarse en un contundente 23-3. Hubo reacción de los ordiziarras, que se acercaron hasta el 28-24 a falta de pocos minutos para el final. Pero un drop de la Sanboiana en el 80 puso el definitivo 31-24.

Polémico arbitraje

El Getxo Artea no pudo romper el maleficio que le persigue cada vez que viaja hasta el estadio Pepe Rojo, donde el CIC Rugby Valladolid se llevó la victoria merced a un ensayo en el descuento que, según los vizcainos, sólo vio el colegiado (29-25). No fue ésta la única decisión del árbitro discutida por los getxotarras, que sufrieron, entre otros castigos, tres exclusiones durante la segunda mitad.

El punto bonus sumado por los vizcainos es un premio a todas luces insuficiente a tenor de lo visto sobre el terreno de juego, pero permite al Getxo Artea mantenerse en la zona templada, doce puntos por encima de los puestos de descenso.

El técnico gualdinegro, Asier Basterretxea, era muy claro en sus declaraciones: «Ha sido una verdadera vergüenza. Tenía que ganar el de casa fuera como fuera y al final lo ha conseguido. Nos expulsan a un jugador en el descuento, alarga el partido hasta que consiguen un ensayo que no es y justo después pita el final. Así no se pueden hacer las cosas».