tras la suspensión de anv y ehak
La marcha de hoy en Bilbo se mantiene pese al veto de Garzón y el aviso de Lakua
GARA | DONOSTIA
Pese la declaración de ilegalidad dictada ayer por el juez Baltasar Garzón, las calles de la capital vizcaína acogerán hoy al mediodía una manifestación que se presume multitudinaria «a favor de los derechos de Euskal Herria». Tras conocer la prohibición y la consiguiente comunicación del Departamento de Interior de Lakua, a quien Garzón encarga ejecutar el mandato, los electos independentistas consideraron necesario mantener la marcha argumentando que «tenemos derecho a denunciar en la calle esta salvaje situación de excepción».
Alrededor de las 16.00, Baltasar Garzón emitía un auto en la que decretaba la ilegalidad de la marcha. En el mismo, el juez esgrima que esta manifestación «entra dentro del ámbito de la suspensión de actividades» de EHAK y ANV decretada el viernes, aunque la convocatoria no ha sido formulada por ninguno de estos partidos sino por electos (pese a ello, muchos medios la presentaron ayer como una iniciativa de ANV). Garzón afirma que la marcha es «inviable» porque, a su juicio, «está claro» que al margen de quien convoque formalmente, el acto responde «al llamamiento general y conjunto» de los dos partidos.
Así, el juez se dirige a la Ertzaintza para ordenar que impida el desarrollo de la manifestación «y persiga a quienes que- branten el orden». El Departamento de Interior del Gobierno de Lakua se apresuró a emitir su nota para advertir de que la manifestación está prohibida.
Sin embargo, los electos independentistas aseguraron que «todos estas trabas» no los moverán «ni un milímetro de su trabajo político», por lo que mantuvieron la manifestación.
Llamamiento al PNV
En el comunicado enviado a los medios, resaltaron que el PSOE «se equivocará de nuevo si pretende acobardarnos con la represión». Al mismo tiempo, recordaron que en las pasadas elecciones de mayo «miles y miles de ciudadanos nos dieron su voto para contribuir al cambio político». Es por ell, por lo que ratificaron su compromiso de seguir trabajando «en pro de un marco democrático y por situar a Euskal Herria a las puertas de la independencia».
Para estos electos independentistas, «todo este camino represivo es reflejo de la debilidad del PSOE». Frente a ello, aseguran que la izquierda abertzale está «más fuerte que nunca políticamente. Y entienden que «es tiempo de decir `stop'».
Los electos también tienen palabras para el PNV, al que llaman a que actúe al mediodía de hoy «con responsabilidad hacia este pueblo» porque «de lo contrario, seréis responsables directos de lo que suceda».
Mientras tanto y sin esperar a la convocatoria de hoy, han sido incontables las movilizaciones realizadas por la geografía vasca en las últimas horas. El viernes, en Urduña se reuniron 40 personas, en Bakaiku 20, en Oñati 85, en Iturrama 80, en Iurreta 75, en Aretxabaleta 40, en Arrigorriaga 50, en Deba 60, en Mutriku 95, en Mallabia 22, en Galdames 10, en Zestoa 85, en Zangoza 25, en Gares 50, en Lekeitio 150, en Arbizu 42, en Errotxapea 50, en Faltzes 10, en Araia 50, en Txantrea 50, en Lazkao 100, en el barrio donostiarra de Gros 65, en Altsasu 70, en Trintxerpe 40, en Ikaztegieta 20, en Errenteria 600, en Berango 31, en Soraluze 100, en Basauri 60, en Villabona 70, en Usurbil 90, en Urretxu-Zumarraga 130, en Legazpi 100, en Amezketa 30, en Anoeta 29, en Alegia 30, en Leitza 40, en Nabaskoize 50, en Urdiain 15, en Hernani 350, en Gatika 30, en Mungia 70, en Usansolo 30, en Forua 20, en Aulesti 84, en Algorta 120, en Muskiz 20, en Balmaseda 14, en Zaldibar 50, en Larrabetzu 95, en Leioa 110, en Erandio 62, en Munitibar 25, en Andoain, 80, en Legorreta 45, en Agoitz 40, en Laudio 70, en Zalla 20, en Egia 100, en Otxandio 50, en Plentzia 30, en Pasai Donibane 30, en Goizueta 40, y en Irura, Eibar y Zestoa hubo cortes de carretera.
Ayer en Ea se reunieron 85, en Usansolo 35, en Elgeta 20, en Berango 60, en Lekeitio 160, en Aulesti 102, en Larrabetzu 108, en Aramaio 40, en Erandio 60, en Soraluze 80, en Plentzia 30, en Balmaseda 15, en Getaria 45, en Orkoien 50, en Donostia 300, en Irunberri, 40 (el viernes) y 30 (ayer), en Orereta 200, en Aurizberri 21, en Erromo 65, en Elizondo 30 y otros tantos en Iturrama, donde la Policía hizo amago de carga.
En Mungia sí hubo irrupción policial, que dejó cuatro vecinos heridos según testigos.
En Barañain el viernes se realizó un corte de carretera donde participaron 100 personas, ayer fueron 90. Denunciaron que el pueblo estuvo «ocupado». Mientras tanto, en Iturrama durante la tarde de ayer se cortó la electricidad en varias calles.
A lo largo de la noche del viernes, fueron múltiples los sabotajes realizados por la geografía de Euskal Herria contra entidades bancarias, sedes e incluso la vivienda de un concejal del PSE en Irun.
Este último ataque, que fue condenado en el mitin del PSOE en Donostia con presencia de José Luis Rodríguez Zapatero y por parte de casi todas las formaciones políticas, afectó al domicilio de Félix Asensio, que además de ser concejal en Irun es procurador en las Juntas Generales de Gipuzkoa -cargo este último logrado gracias a la ilegalización de ANV-. El sabotaje tuvo lugar sobre las 2:30 horas, cuando los autores lanzaron entre cinco y seis cócteles molotov contra la vivienda de Asensio, lo cual causó el ennegrecimiento de parte de la fachada y algunos daños en el jardín, ya que se trata de un chalé.
En Gasteiz, por su parte, varios desconocidos lanzaron un artefacto mixto, compuesto por líquido inflamable y un petardo pirotécnico, contra el cajero de una sucursal del BBVA situado en la calle Reyes de Navarra, provocando daños en el cajero. El humo se introdujo en el portal del inmueble situado junto a él, por lo que los vecinos de las dos viviendas de la primera planta tuvieron que ser desalojados durante una hora.
En Basauri, poco después de la medianoche desconocidos rompieron los cristales de la taquilla del apeadero de Renfe y arrojaron líquido inflamable, provocando un pequeño incendio que fue sofocado con extintores por agentes de la Ertzaintza. El sabotaje produjo daños en el mobiliario interior y el ennegrecimiento del local.
También minutos después de la medianoche, un grupo de encapuchados arrojó cócteles molotov contra cuatro entidades bancarias -Banco Guipuzcoano, Santander, BBVA e Ipar Kutxa- en el barrio de Santutxu de Bilbo, causando daños en los cajeros automáticos y en las fachadas.
Por otro lado, durante la madrugada también rompieron los cristales y la puerta de entrada al batzoki del PNV de Elorrio, en cuyo interior realizaron pintadas contra esa formación. Similares daños se produjeron en la sede del PSE de esa misma localidad vizcaína, según precisó Interior de Lakua.
Todos estos sabotajes fueron condenados por partidos políticos e instituciones. El alcalde de Irun, por ejemplo, calificó el sabotaje contra la vivienda del edil de su pueblo como un «acto criminal inaceptable en una democracia». Asimismo, la presidenta de las Juntas Generales de Gipuzkoa, Rafaela Romero, dijo que «contra los violentos, los que les apoyan y silencian, sólo hay ley y Estado de Derecho».
EA, por ejemplo, también mostró su rechazo ante estos ataques, manifestando que sus autores son unos «desalmados a los que rechaza la sociedad». Subrayó además, que «aunque las últimas decisiones judiciales pueden ser criticadas, no son excusa para amedrentar a la población vasca».
El equipo de Gobierno de Basauri dirigido por el PSE, por citar algún otro ejemplo, expresó su deseo de que «la Policía detenga y encarcele a los autores del ataque».
Los ayuntamientos de dichas localidades aprobaron una moción en contra de la suspensión decretada por Garzón y en favor de ANV. En Arbizu se aprobó por unanimidad; en Legorreta sólo votaron favorablemente los cinco ediles de ANV.
