La jornada de huelga estuvo marcada desde primera hora de la mañana por algunas acciones llamativas y sabotajes. A medida que pasaban las horas, la intervención de los distintos cuerpos policiales iba dejando un reguero de cargas violentas, algunas con heridos, detenciones y procedimientos que pueden terminar en multas administrativas o en procesos judiciales.

En Bizkaia, alrededor de las 7.30 se lanzaron neumáticos, uno de ellos ardiendo, sobre la línea ferroviaria del metro, entre las estaciones de Areeta y Gobela, en Getxo. El servicio se restableció poco antes de las 8.00, aunque los retrasos no se pudieron solventar hasta bien entrada la mañana. En la línea 2, a las 8.00, dos personas se colgaron del viaducto de la estación de Urbinaga, en Sestao, lo que provocó la interrupción del tráfico hasta que quienes se habían descolgado, Gorka Pérez de Nanclares e Igor Zulaika, fueron izados y detenidos.

Un poco más tarde, a las 9.15, en Gipuzkoa se registró el corte de la catenaria en la línea de Renfe entre Legorreta y Tolosa, que interrumpió durante tres horas el tráfico ferroviario, afectando tanto a líneas de larga distancia como a los trenes de cercanías. Sólo funcionaron con normalidad los trenes del recorrido Irun-Tolosa y Legorreta-Brinkola, mientras que se vieron afectadas dos líneas de larga distancia, la de Irun-Barcelona, cuyos viajeros fueron trasladados en autobús desde Irun hasta Tutera, y la Irun-Vigo, que obligo al traslado por carretera desde Tolosa hasta Miranda.

Cortes de carretera en Bilbo

En Bilbo, minutos antes de las 8.00, seis personas se encadenaron a tres bidones rellenos de cemento, cortando el tráfico rodado en la subida de Miraflores. Debido a la dificultad para deshacer esa cadena, el tráfico se vio interrumpido hasta las 10.15. Por esta acción, la Ertzaintza detuvo a Lur Gallastegi, Hegoa Ugalde, Juncal González, Irati Martínez, Mikel Sánchez y Goiuri Méndez.

A la misma hora, en otro de los accesos a la capital vizcaina, en Juan de Garai, la Policía autonómica detuvo bajo la acusación de desórdenes públicos, lesiones y coacciones a Olatz Gallo, Itxaso Viñe, Jon Mikel Iturriaga, Patxi Ramos e Iñigo Larrondo, cuando al parecer intentaban realizar una acción simi- lar a la de Miraflores. En el contexto de esta detención, uno de los bidones rodó calle abajo y una persona que intentó detenerlo con el pie sufrió una fractura en una pierna.

La Policía Municipal de Iruñea, por su parte, informó de que durante la noche del miércoles desconocidos incendiaron tres contenedores en la calle del Carmen, en el Casco Antiguo, y en la txantreana calle San Cristóbal. Anteriormente, en este barrio hubo un corte de carretera y se bloquearon cerraduras de algunos locales.

También en Nafarroa, dos barricadas, a las que posteriormente prendieron fuego, fueron colocadas, a las 5.00 de la madrugada en los polígonos industriales de Landaben, en Orkoien, y Albisualdea, en Lekunberri.

En Gipuzkoa, desconocidos levantaron una barricada incendiaria en la Gi-627, a su paso por Eskoriatza, a las 5.10 de la madrugada. Una patrulla de la Ertzaintza se desplazó al lugar y los bomberos extinguieron el fuego. La carretera permaneció cortada al tránsito rodado durante veinte minutos.

En varios puntos de Gasteiz también se incendiaron contenedores durante la madrugada.

Ya con el día amanecido, en Donostia se levantaron barricadas incendiarias en distintos barrios. Ligada a estos hechos hubo una detención. En la N-I, a la altura de Villabona, en sentido Irun, también se prendió fuego a un montón de neumáticos, interrumpiéndose el tráfico de vehículos. En Zestoa, la GI-631 quedó cortada al ser cruzado un árbol sobre la calzada.

Barricadas de este tipo también se colocaron en la carretera que une Durango y Elorrio, a su paso por el municipio de Atxondo; en el casco urbano de Sestao, en la calle Los Baños; en Soraluze y en Barañain.

En el campus de la UPV-EHU de Gasteiz, la Ertzaintza identificó a 35 jóvenes que participaban en una protesta, a los que mantuvieron retenidos cerca de media hora.

Controles policiales

Según informó el movimiento antirrepresivo, los cuerpos policiales no sólo identificaron a personas que participaban en las movilizaciones, sino que también se dedicaron a registras las matrículas de quienes participaban en caravanas de coche llamando a secundar la jornada de huelga. Más de mil vehículos fueron identificados en esos controles.

En Azpeitia, Andoain, Oiartzun y Hernani, la Ertzaintza tomó nota de los vehículos que participaron en caravanas.

En Nafarroa, la Guardia Civil instaló un control en Lizarra; la Policía foral hizo lo propio en en el barrio iruindarra de la Txantrea, mientras que la Policía española tomó filiación de numerosos jóvenes en el instituto de Iturrama, así como a varios vecinos en Burlata. En el polígono Landaben retuvieron y pidieron identificarse a una quincena de personas. En Atarrabia identificaron a todos los integrantes de un piquete informativo, deteniendo a una persona porque portaba un spray.

La Policía española cargó en Berriozar contra aproximadamente 150 personas que participaban en el reparto de hojas informativas junto a un centro comercial de Eroski.

Por otra parte, efectivos de la Ertzaintza arremetieron contra una manifestación que se celebró hacia las 11.00 en Sestao, arrestando a tres personas. Algo similar ocurrió en Portugalete, donde la Policía autonómica cargó contra un piquete, procediendo a detener a un vecino de la localidad jarrillera.

En Gipuzkoa, la Ertzaintza tomó filiación a tres personas en Pasaia -uno de ellos concejal de la izquierda abertzale y los otros dos, policías municipales-, mientras que en Ordizia actuaron de igual manera contra siete jóvenes que salían del instituto.

Las identificaciones de ciudadanos y ciudadanas abertzales por parte de la Ertzaintza por participar en movilizaciones en la calle se repitieron en los donostiarras barrios de Egia y Martutene, en Bilbo, Urnieta, Bergara, Azpeitia y Errenteria.

En este último municipio, la Policía autonómica cargó contra una manifestación en la que tomaron parte alrededor de 2.000 personas; diez de ellas resultaron heridas de distinta consideración y una fue atendida en el ambulatorio con la frente abierta como consecuencia de la actuación policial.

En Azpeitia hubo otro detenido por negarse a identificar; posteriormente quedó libre, aunque se le ha señalado juicio rápido para el próximo martes. Durante la discusión con los manifestantes, un ertzaina les espetó: «Soy español con mucho orgullo; mejor que ser unos putos nazis como vosotros».