Al menos 40 peregrinos chiíes mueren en un atentado kamikaze
Unos 40 peregrinos chiíes que marchaban hacia la ciudad santa de Kerbala, al sur del país, murieron como consecuencia de un atentado kamikaze mientras se tomaban un descanso en el trayecto, en la ciudad de Iskandariyah. Otros sesenta peregrinos resultaron heridos. Se trata del segundo gran atentado en Irak desde que las fuerzas ocupantes mostraron su satisfacción por los resultados del plan especial desplegado en Bagdad.GARA |
Al menos 40 personas que se dirigían en peregrinaje a la ciudad santa chií de Kerbala murieron ayer en un atentado kamikaze registrado en Iskandariyah, localidad situada al sur de Bagdad, según un balance realizado en base a datos de fuentes policiales y hospitalarias.
Unas sesenta personas resultaron, además, heridas en este ataque, que se produjo contra un lugar en el que acababa una etapa para los peregrinos chiíes que se dirigen a Kerbala, al sur del país, para celebrar el 40º día después de la muerte del imam Hussein.
«Hacia las 15.00 (13.00, hora de Euskal Herria), un kamikaze penetró en una tienda en la que comían decenas de peregrinos y se hizo explotar. El balance que disponemos habla de al menos 40 muertos y 60 heridos», indicó a France Presse Karim al-Timimi, teniente de Policía de la provincia de Babel.
El doctor Mohammed al-Zaidi, de los servicios hospitalarios de Hilla, capital de la provincia, confirmó este balance y subrayó que 25 de los heridos estaban en grave estado.
Los servicios de socorro hicieron un llamamiento a la población para que donase sangre.
Un primer balance facilitado por una fuente en el seno del Ministerio del Interior hablaba de al menos 25 muertos en el atentado.
«Un kamikaze ha llevado a cabo el ataque a las 14.47 (12.47, hora de Euskal Herria), indicó, por su parte, el Ejército de EEUU, destacando que «cerca de 42.000 peregrinos han pasado por esta zona hoy [ayer]».
Se trata del segundo gran atentado en Irak desde que, en febrero, la Administración de EEUU y el Gobierno iraquí se felicitasen por la bajada del número de actos de violencia tras la puesta en marcha de un plan de seguridad en Bagdad en febrero de 2007 y el reforzamiento de las operación del Ejército estadounidense en el resto del país árabe.
El 1 de febrero, al menos 98 personas murieron y 208 resultaron heridos en dos atentados kamikazes supuestamente llevados a cabo por mujeres en mercados de Bagdad.
Alerta en Kerbala
Los grupos armados iraquíes, especialmente la red al-Qaeda, suelen atacar a los peregrinos chiíes que viajan desde Bagdad hacia Kerbala y Nayaf, sus ciudades santas, situadas al sur del país.
Para tratar de evitar los atentados en Kerbala, las fuerzas de seguridad iraquíes han desplegado más de 40.000 efectivos. El peregrinaje supone la llegada de verdaderas oleadas humanas a esta ciudad.
«Nuestras fuerzas están dispuestas a hacer frente a cualquier amenaza proveniente de grupos extremistas», señaló recientemente el jefe de la Policía de Kerbala, el general Raed Chaker Jawdat. «Tenemos 29 detectores de explosivos y tres brigadas de intervención rápida equipadas con armas modernas», añadió.
El primer ministro iraquí, Nuri al-Maliki, abandonó ayer Bagdad para someterse un examen médico, el segundo en dos meses, en Londres, según informó Alí Dabbagh, portavoz del Gobierno iraquí.
Las fuerzas de seguridad iraquíes desplegaron 40.000 efectivos en Kerbala con motivo de la llegada masiva de peregrinos chiíes a esta ciudad del sur del país árabe debido a que han pasado 40 días de la celebración de la muerte del imam Hussein.