IPURUA La permanencia, a diez puntos
El Eibar acaba con todos sus fantasmas a base de goles
Asier Goiria, con un hat-trick, y Natxo Insa firmaron el triunfo más contundente de la temporada para el Eibar, que mantiene su buena dinámica en casa y se sitúa ya a sólo diez puntos de la permanencia.
EIBAR 4
TENERIFE 0
Amaia U. LASAGABASTER | EIBAR
Frío, granizo, poquito público... No parecía el día propicio para disfrutar con un partido, pero Ipurua acabó haciendo la ola. Ya se sabe, el fútbol es así.
Y es que no pudo encontrar el Eibar mejor manera de sacudirse el frío. Ni de acabar con sus fantasmas, que aniquiló de un golpetazo. O de cuatro, para ser exactos, los goles con los que firmó su victoria más contundente de la temporada. El primer triunfo en sus numerosos enfrentamientos con el Tenerife y, puestos a acabar con las malas rachas, una goleada que empezó con un tanto de penalti.
Una jugada que resultó, pese a todo lo que quedaba por delante, definitiva. Pero es que el Tenerife había saltado al campo con ganas de mandar y, de paso, unirse a la lista de rivales a los que el Eibar ha ayudado a acabar con sus malas rachas. En este caso la que confirma a los chicharreros entre los peores visitantes de la categoría, con los mismos once puntos que el cuadro armero.
Lo cierto es que aquel inicio no hacía presagiar nada nuevo. No acompañaba la climatología, tampoco el ambiente y al Eibar, consciente de que mantener su buena dinámica en Ipurua se ha convertido casi en una cuestión de vida o muerte, le costaba encontrar su sitio. Pero mientras el Tenerife desaprovechaba su primera -y casi última, porque apenas volvió a acercarse a la portería de Iván Cuéllar-, su anfitrión tiró de efectividad. Al cuarto de hora, N'Diaye cortaba con la mano un centro de Codina y Goiria, olvidando cualquier psicosis, se fue directo con el balón al punto de penalti. Su decisión tuvo premio: gol y lo que estaba por venir.
Al Tenerife le sentó fatal el cambio de planes. Sólo Hormiga, colocándola a balón parado o con lanzamientos lejanos, parecía capaz de hacer daño a un Eibar que fue sintiéndose cada vez más cómodo. Cuéllar, de hecho, sólo tuvo que intervenir en una ocasión hasta el descanso, mientras la defensa canaria recibía las primeras muestras de lo que acabaría viniéndosele encima, sobre todo a cargo de un Codina en estado de gracia. Del Olmo, Goiria, Altuna o el propio Codina tuvieron en sus botas la posibilidad de ampliar distancias hasta el descanso.
No lo consiguieron, pero tampoco hubo que esperar demasiado para que el partido quedase sentenciado. Nada más comenzar el segundo tiempo, Asier Goiria controló en el área un servicio de Del Olmo para anotar el segundo y aniquilar definitivamente al rival.
De nada le sirvió a José Luis Oltra poner en liza a todos sus delanteros. El Tenerife vagó sin rumbo a lo largo de toda la segunda parte, en la que fue incapaz de crear peligro y menos aún de evitar que lo hiciera su rival. Un Eibar que lo acaparó todo: posesión, ritmo y ocasiones. Ya se vislumbraba que la goleada azulgrana era sólo cuestión de tiempo.
Y no demasiado, porque Goiria sólo necesitó siete minutos más para completar el primer hat-trick de su carrera -alcanza ya la decena esta temporada-. De nuevo, además, con un gol de bella factura, aprovechando en esta ocasión un pase del imparable Codina para ajustar el balón al palo.
De ahí al final, festival de los armeros que pudieron acabar firmando una goleada aún más contundente. Codina e incluso un renqueante Del Olmo entraban como el cuchillo en la mantequilla, y también Txiki, Raúl García o Lombraña, que subían sin la más mínima oposición ante un Tenerife al que se veía deseoso de llegar cuanto antes al final del partido, incapaz de darle la vuelta.
Mediado el segundo tiempo, y mientras Oltra seguía buscando, inútilmente, la reacción a base de delanteros, Manix dio descanso, y homenaje, a los jugadores más activos, sustituyéndoles por Natxo Insa, Albert Yagüe y José Zamora, que tampoco desaprovecharon su oportunidad. Sobre todo los dos primeros, que firmaron el definitivo 4-0, al sujetar el balón el catalán en un saque de banda, cediéndolo para que Insa marcase de volea. El propio Yagüe estuvo a punto de redondear la manita en un forcejeo con Juanma, pero Juan Pablo pudo evitarlo esta vez.
Con el Eibar recreándose y las gradas de Ipurua celebrándolo con la ola, llegó la única oportunidad del Tenerife en todo el primer tiempo, un rápido contragolpe de Rubén que Cuéllar despejó a córner.
Incluso ese gol habría sido demasiado premio para un equipo que se vino abajo a las primeras de cambio y acabó barrido por un Eibar que se sitúa ya a sólo diez puntos de la permanencia y acomodado de nuevo en la zona noble de la tabla.
Por una vez no se sufrió -quizá un poquito en los primeros minutos- y, por una vez, tampoco hubo una sola pega a una jornada perfecta para el Eibar. El equipo armero se recuperó de su enésimo tropiezo a domicilio, firmó su primera victoria ante el Tenerife y además se recreó con el resultado más contundente de la temporada.
«Y además no ha habido lesionados, el delantero ha hecho un hat-trick, hemos dejado la puerta a cero, hemos jugado bien... -añadía Javier Mandiola-. Ha sido un partido perfecto, en el resultado y en los detalles».
Sí reconoció el técnico azulgrana que el Tenerife «ha empezado muy bien, moviendo el balón y haciéndonos sufrir un poco. Pero en la segunda llegada hemos marcado, hemos cogido el sitio, no les hemos dejado hacer cosas y se ha empezado a romper el partido. Y en la segunda parte hemos sido dueños y señores del partido».
En definitiva, una jornada redonda que, además de los puntos, se refleja en una mayor dosis de «confianza, aunque nunca la hemos perdido. Pero si juegas bien, tienes más puntos y si tienes más puntos, tienes confianza para jugar mejor». Además, a estas alturas de la temporada, los puntos se agradecen aún más. «Está cerca -sólo faltan diez puntos para cruzar la meta de los 50-, pero falta una pequeña brecha y ahora no podemos parar, porque suele costar más arrancar», advirtió Manix.
La cruz de la moneda llegó con José Luis Oltra, contundente a la hora de expresar el mal sabor de boca con el que acabó «el peor partido de la temporada». «No podemos poner paños calientes con que el Eibar haya marcado en la primera ocasión y de penalti, porque quedaban muchos minutos de delante -aseguró-. Ni siquiera porque nada más empezar la segunda parte nos hayan hecho el segundo. El problema es que no hemos tenido carácter ni alma. En la segunda parte nos han dado un baño, nos han pasado por encima. Si hubiéramos seguido jugando, habrían llegado más goles del Eibar», concluyó el técnico.
Asier Goiria, por su parte, se reconoció «especialmente contento» con su primer hat-trick. «Sobre todo porque el equipo ha ganado, pero si además es marcando tres goles, mucho mejor. Ha salido todo redondo», se congratuló. Igualmente satisfecho se mostraba Natxo Insa, autor del cuarto gol azulgrana. Y, como su compañero, «sobre todo porque hemos sumado tres puntos y ya nos quedan menos». Iván Cuéllar -que acabó el partido ligeramente mareado-, por último, destacó que fue «el partido que todos los porteros queremos: sin goles y sin trabajo».
A.U.L.
Asier Goiria anotó ayer el primer hat-trick de su carrera. El delantero vizcaino se confirma además como el máximo realizador azulgrana, ya con diez goles.
Tras haber disfrutado de la titularidad en las dos últimas jornadas, Dani Martino quedó ayer fuera de la convocatoria. El asturiano siguió el partido desde la grada junto a Gurrutxaga, Eizagirre y Nico Medina, además de los lesionados Manel y Etxabe.
Los azulgranas tendrán más tiempo que de costumbre para celebrar la victoria, ya que Manix ha concedido a su equipo dos días de descanso. Será el martes cuando empiecen a preparar la visita al Salamanca del próximo domingo (18.00).