Cuantiosos daños materiales tras el atentado de Calahorra

Las autoridades todavía no han avanzado una cifra, pero definen como «importantísimos» los daños materiales provocados por ETA con la colocación de un coche-bomba en la parte trasera del cuartel de la Guardia Civil en Calahorra. El edificio, que iba a ser reemplazado por una nueva instalación, será derruido antes de lo previsto. No hubo heridos de consideración tras el aviso previo. La deflagración fue muy potente: se calcula que había unos 70 kilos de explosivo.