El Consejo de Ministros del Gobierno español reunido ayer acordó llevar adelante la expropiación forzosa de terrenos para la construcción del nuevo centro penitenciario de Iruñea que se situará en la colina de Soltxate, entre el barrio de Sanduzelai y el poblado de Santa Lucía. Tras este acuerdo, los propietarios que se han negado a vender sus terrenos se verán obligados a hacerlo.

Desde que se diera a conocer la ubicación de la nueva prisión, vecinos de los barrios de Sanduzelai y Buztintxuri han hecho público su malestar con esta ubicación.

De hecho, la asociación de vecinos de este último barrio, el grupo municipal de EAE-ANV, así como diversos movimientos ecologistas, han manifestado su rechazo al pro- yecto, entre otros aspectos por suponer la ocupación de una de las zonas de esparcimiento de las afueras de Iruñea. Se prevé que el penal ocupe unos 250.000 metros cuadrados de terreno en la colina de Soltxate.

La creación de la nueva prisión de Iruñea se enmarca dentro del Plan de Amortización y Creación de Centros Penitenciarios, actualizado por el Consejo de Ministros español en el año 2005, el cual prevé la creación de nuevas infraestructuras penitenciarias debido al incremento de la población reclusa y la escasez de plazas existentes.

Así, la apertura de este nuevo centro de internamiento implicaría el cierre inmediato de la prisión que actualmente permanece en funcionamiento en la capital navarra, situada en el centro de la ciudad y que ya cuenta con más de cien años de antigüedad.