Tsvangirai se proclama presidente en Zimbabwe sin que haya resultados oficiales
Pese a que cuando ya ha pasado una semana de las elecciones presidenciales de Zimbabwe no hay resultados oficiales, el líder de la oposición, Morgan Tsvaringai, se proclamó vencedor e hizo un llamamiento a Robert Mugabe al diálogo para «asegurar una transición pacífica».
GARA |
El líder de la oposición de Zimbabwe, Morgan Tsvangirai, se proclamó ayer vencedor de las elecciones presidenciales del 29 de marzo y llamó al actual presidente, Robert Mugabe, al diálogo para «asegurar una transición pacífica».
«Hemos ganado las elecciones sin que haya sido necesaria una segunda vuelta», afirmó el líder del Movimiento para el Cambio Democrático (MDC), presentándose, por primera, como presidente electo de Zimbabwe.
Previamente, el portavoz de Mugabe, George Charamba, alertó de que una reivindicación de la victoria electoral sin que se hubieran dado a conocer los resultados oficiales sería considerada como «un golpe de Estado».
Una semana después de los comicios, la Comisión Nacional Electoral aún no ha publicado los resultados de las presidenciales. Sí ha dado a conocer que el partido de Mugabe, el ZANU-PF, ha perdido su mayoría en la Cámara de Diputados. Ayer, además, anunció que en el Senado tanto el ZANU-PF como el MDC habían logrado 60 escaños cada uno.
El ZANU-PF se mostró el viernes dispuesto a apoyar a Mugabe, de 84 años, para que concurra a la segunda vuelta, lo que suponía un reconocimiento implícito de que, por primera vez en su ya larga carrera política, no había obtenido la mayoría absoluta de los votos en la primera vuelta.
Tsvangirai reaccionó ayer llamando a Mugabe al diálogo. Junto a ello, aseguró a las fuerzas armadas, uno de los pilares del poder del ZANU-PF desde la independencia en 1980, que «serían integradas sin represalias en un nuevo Zimbabwe».
«Llamo al presidente Mugabe a poner en marcha un diálogo para impulsar un proceso de transición pacífica, ordenada y democrática», señaló Tsvangirai.
«Aseguro a aquellos que sirven al Estado, en particular en el Ejército y en la Policía, que sus empleos están garantizados y que no se van a encontrar ni castigos ni voluntad de venganza», añadió.
«Quiero decir al presidente Mugabe: Tenga el espíritu tranquilo, el nuevo Zimbabwe garantiza su seguridad», añadió el líder de la oposición.
Tsvangirai, que no había comparecido en público desde el martes, acusó al ZANU-PF de «fomentar una guerra contra el pueblo de Zimbabwe, como hizo en 2000», cuando Mugabe perdió un referéndum constitucional y los miembros de su partido ocuparon granjas de la minoría blanca.