El colectivo Ahaztuak 1936-1977 se presentó ayer por la tarde en Trebiñu mediante una charla-coloquio realizada en la ludoteca municipal de Argantzun en la que se presentó un informe provisional sobre la represión franquista en esta localidad.

En el acto participaron varios familiares de víctimas del franquismo muertas en Argantzun y el escritor Iñaki Gil Basterra, autor de dos libros sobre este tema: «Araba 1936: guerra y represión» y «Jurisdicción especial y represión franquista en Alava: 1936-1942. Documentación del Tribunal de Responsabilidades políticas para Alava».

Durante la charla-coloquio de ayer, los miembros de Ahaztuak recordaron que, con la excepción de la batalla de Legutiano, en el territorio alavés no hubo frente de guerra tras el golpe de Estado franquista de 1936 ni contiendas bélicas.

«A pesar de ello -informaron en la charla- el castigo ejemplarizante de los franquistas para con los alaveses republicanos fue atroz. Se estima que son más de 350 las personas asesinadas en Araba, exterminadas por el fascismo, primero con fusilamientos extrajudiciales, `paseos' y desapariciones forzosas, después con consejos de guerra sumarísimos y penas de muerte».

Tras constatar que muchas de aquellas personas muertas continúan en enterramientos ilegales, en cunetas y fosas comunes, los miembros de Ahaztuak dijeron que también cientos de presos políticos murieron en territorio alavés a consecuencia de «las duras condiciones de vida en los campos de concentración (trabajos forzosos, esclavitud, enfermedades, desasistencia...) durante los primeros años tras la sublevación militar».

«Represión salvaje»

En lo que se refiere a la represión franquista en Argantzun, el informe provisional presentado ayer por Ahaztuak recoge que acabaron con la vida de seis vecinos de esta localidad y otras 13 personas procedentes de otros pueblos o a quienes el golpe de Estado les sorprendió en este término municipal.

De algunas de estas personas se han podido aportar sus nombres y apellidos, mientras que otras todavía no han podido ser identificadas.

«En el Condado de Trebiñu se pueden diferenciar dos zonas: los pueblos dependientes del Ayuntamiento de Trebiñu y Argantzun. La represión fue salvaje. En la circunscripción de Trebiñu se contabilizan 17 vecinos asesinados y en Argantzun hemos documentado otra veintena de crímenes. En total son 36 personas asesinadas, y a medida que avance este proyecto, puede que se descubran más casos», anunció este colectivo. De momento, se han recopilado datos de 13 víctimas mortales en el término de Las Conchas.